El consumo seguirá tirando de la recuperación en Estados Unidos
En Estados Unidos, los indicadores publicados en los meses estivales anunciaban un buen comportamiento de su economía en el tercer trimestre de 2003. Sobre las base de estos indicadores se esperaba una mejora de la inversión y una aceleración del consumo privado. Pese a estar anunciado, lo cierto es que los datos de contabilidad nacional del tercer trimestre, que arrojaron un aumento del PIB del 7,2% (tasa intertrimestral anualizada), sorprendieron a todos los analistas por su fortaleza.
Como estaba previsto, el aumento de la producción estuvo liderado por el consumo, que repuntó hasta una tasa del 3,5% (2,9% en el segundo trimestre). La inversión también mejoró, aportando un punto al crecimiento. Por el contrario, el sector exterior mantuvo una evolución negativa, restando 0,4 puntos al aumento del PIB.
De cara al 2004, nos preguntamos si la economía americana podrá seguir manteniendo el ritmo de crecimiento registrado en los dos últimos trimestres. Aunque la inversión viene mejorando desde marzo, y esperamos que lo siga haciendo en el futuro, no creemos que ésta vaya a tirar con fuerza en 2004. Tampoco cabría esperar una mejora considerable del sector exterior, por lo que la clave está en saber si el consumo privado mantendrá su fortaleza.
Atendiendo a la evolución que recientemente están teniendo los indicadores de consumo, tanto los de gasto real como los de expectativas, la respuesta es afirmativa. No obstante, en la medida en que no se corrija el desequilibrio financiero de las familias, que tienen un elevado endeudamiento, seguirá presente el riesgo de una nueva desaceleración del consumo, con efectos contractivos sobre la demanda agregada, pues una elevación apreciable del tipo de interés podría crear problemas de solvencia a las familias.
Respecto a los indicadores de consumo, el ingreso disponible se está expandiendo a tasas del 3,0%. Por otra parte, el mercado de renta variable, de cuya evolución depende la riqueza financiera de las familias, mantiene también una tendencia alcista. Algunos de los índices más representativos de la Bolsa acumulan un aumento de alrededor del 6% desde mediados de año.
A estos datos hay que añadir la mejora del empleo, que en octubre aumentó en 126 mil personas. æpermil;ste es el tercer mes consecutivo que el empleo aumenta de forma sostenida, acumulando un aumento de 286.000 personas desde julio. Por otra parte, las peticiones de desempleo también están cayendo en noviembre por lo que parece que se consolida la mejora del mercado de trabajo. La mejora del empleo proviene del sector servicios, ya que en las manufacturas la tendencia sigue siendo negativa. No obstante, cabe señalar que las caídas del empleo en este sector vienen siendo cada vez menores. En este contexto, y ante un mayor optimismo de los consumidores, los datos de ventas de noviembre (excluyendo automóviles) han sido bastante buenos. Todo ello augura, al menos a corto y medio plazo, continuidad en la fortaleza del consumo y la producción.
Claves a tener en cuenta
Fuerte crecimiento impulsado por la fortaleza del consumo de las familias. Mejora del mercado de trabajo y expectativas de los consumidores.Posible continuidad en los próximos meses de la fortaleza del consumo y mantenimiento de riesgos asociados a un elevado endeudamiento de las familias.Claves a tener en cuenta
Mejora la industria y la construcción
Los sectores de la construcción y el industrial mejoran considerablemente. La construcción, tanto pública como privada, se expandió a tasas elevadas en septiembre. Los permisos de construcción y viviendas iniciadas de octubre han acelerado su ritmo. El sector industrial mantiene la tendencia alcista, siendo el mercado de la construcción el que más está tirando. La producción de bienes de equipo y bienes de consumo fue en octubre más débil.