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Banda ancha

La demanda récord de ADSL en octubre desborda a Telefónica

Las ventas de conexiones a Internet de alta velocidad a través de ADSL han pulverizado todas las previsiones en octubre. La cifra de unidades brutas vendidas asciende a 115.000 líneas, según fuentes de Telefónica, lo que convierte este mes en el mejor de la historia del ADSL, tal y como confirmó ayer en el SIMO el presidente de Telefónica de España, Julio Linares.

Pero los récords no se quedan ahí. El número total de ADSL supera holgadamente los 1,5 millones y, gracias a ellos, las conexiones de banda ancha -ADSL más el cable- se sitúan ya muy cerca de los dos millones, según los cálculos del secretario de Estado de Telecomunicaciones, Carlos López Blanco. El resultado es, en palabras del responsable gubernamental de la telefonía, que España se coloca a la cabeza de Europa tanto por líneas de banda ancha como por usuarios.

La cara negativa de esta sucesión de máximos está en los efectos colaterales. La demanda ha desbordado a Telefónica y, por primera vez en muchos meses, los retrasos han vuelto a estar a la orden del día. La propia compañía reconoce que 'sí ha podido haber una pequeña ralentización; pequeños retrasos de un día o día y medio en las instalaciones de ADSL precisamente por esta fuerte demanda', ha explicado a este diario José Rocillo, director general de Empresas de Telefónica de España. El ejecutivo, sin embargo, descarta problemas de mayor calado y asegura que 'no hay ninguna alarma'.

Las palabras tranquilizadoras de la empresa quedan matizadas por la actitud y los comentarios de alguno de sus comerciales. 'La elevada demanda ha provocado un desabastecimiento de módems en toda España', ha asegurado un asesor comercial a un cliente empresarial para justificar la tardanza en la instalación del ADSL.

Telefónica ha salido al paso inmediatamente a estas informaciones. 'No tenemos problemas de abastecimiento de materiales', señala Carlos Calvo, director general de operaciones de la filial española del negocio de telefonía fija. El directivo reconoce que la demanda récord de octubre 'ha podido generar alguna dificultad' y centra en los clientes empresariales los posibles retrasos, 'ya que el grueso de las compañías contratan ADSL que no son autoinstalables y precisan la intervención de personal de la empresa'.

Pero los particulares tampoco se han quedado al margen de los problemas, a pesar de que muchas de sus conexiones sí son autoinstalables. Y también en estos casos los comerciales avisan de que la alta demanda provocará retrasos en la instalación de 'un mínimo de quince días', según asegura un cliente que cumple el decimoséptimo día de espera por un ADSL.

Las cifras de la banda ancha

1.500.000 conexiones ADSL ha superado España en octubre. Esta tecnología se convierte así en la más demandada y copa las tres cuartas partes de las instalaciones de banda ancha.115.000líneas brutas se han instalado en octubre, superando las previsiones y el anterior récord de 100.000 altas. Telefónica sabe que esta demanda es estacional y que se concentra en los primeros meses del curso. 4.000.000millones de clientes ha prometido la compañía para 2006. Pese al impulso del último mes, a Telefónica todavía le queda camino por recorrer si quiere cumplir sus previsiones en España. 6.000.000de clientes de ADSL en todo el mundo prevé tener la operadora para 2006. España será el centro del plan de despliegue masivo de Telefónica en ADSL, pero también el resto del mundo es su objetivo.

Una innovación que nació con conflictos

La situación actual está muy lejos de parecerse, pero los inicios del ADSL en España también estuvieron marcados por la polémica. La introducción de estas conexiones de banda ancha en España corrió a cargo de Terra, como revendedora del servicio mayorista prestado por Telefónica. Lo hizo a finales de 1999, obligada por el Ministerio de Fomento, y el avance fue lento y complejo. Siete meses después del lanzamiento oficial, había sólo 10.000 líneas instaladas. La lista de espera, sin embargo, ascendía a 50.000 peticiones. ¿El resultado?, demoras de dos a seis meses en conseguir un ADSL. Ahora, la banda ancha es un producto que consumen no miles, sino millones de clientes, pero la fuerte demanda de octubre ha resucitado el fantasma.

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