El grupo alemán Tchibo gana la batalla por el control de Nivea
Tchibo, empresa productora de café controlada por la familia Herz, que ha entrado también en el sector financiero, sonaba ya desde hace meses como pretendiente para hacerse con el paquete de Allianz. El conglomerado controlaba el 30,36% antes de la compra anunciada ayer y se había opuesto a los sucesivos intentos de acercamiento hacia Beiersdorf, que facturó 4.742 millones en 2002.
De hecho, hay quien ha visto detrás de la operación motivos políticos para que el control de una de las empresas alemanas más emblemáticas quedara en manos locales. Un portavoz de Allianz rechazó haber recibido presiones. 'Tchibo simplemente hizo la oferta más atractiva', dijo a Reuters.
Según un comunicado de la aseguradora, los 130 euros pagados por título implican una prima del 20% sobre la media de los últimos 12 meses. Este precio supone valorar la compañía en 10.920 millones. El final de la trama tuvo, no obstante, efecto negativo en la acción de Nivea, que ayer retrocedió un 7,19% y cerró en 100 euros. El valor se había movido en los últimos meses entre rumores de ofertas y contraofertas. Pero la de Tchibo no se extiende a los minoritarios. El grupo no está obligado a hacerlo dado que mantenía la participación desde 1938. Procter & Gamble sí hubiera tenido que ampliarla.
El 40% comprado a Allianz, que aún se queda con un 3,6%, se repartirá entre los integrantes del consorcio. Tchibo se quedará con un 19,6% de las acciones, que sumadas al 30,36% que ya tenía, le da el control efectivo de la firma. Otro 10% de los títulos adquiridos irán a la empresa pública de inversiones de la ciudad de Hamburgo (HGV) y un 3% al fondo de pensiones de Beiersdorf. El 7,4% restante será para Beiersdorf a través de recompra de acciones.
Los analistas, sin embargo, no descartan nuevos capítulos en la pugna por Nivea, ya que se trata de una compañía muy atractiva por su posicionamiento en cosmética, sobre todo su liderazgo en el segmento masculino. La operación anunciada ayer obligaría a Procter & Gamble, uno de los grupos más interesados, a ofrecer más de los 130 euros pagados por Tchibo, lo que sobrevaloraría la firma alemana. Los expertos consideran, además, que la multinacional no se arriesgará a comprar una participación que se quede minoritaria.
Un representante de la familia Claussen, fundadora de Nivea que tiene todavía un 10%, dijo que no aceptaría una oferta de Procter, pero admitió que vendería sus acciones a cambio de un paquete en Tesa, la filial de adhesivos.
La firma de cosméticos L'Oréal y la distribuidora Unilever quedan lejos de la posibilidad por el elevado precio.