Los fabricantes nipones apuestan por el 'ADN japonés' en sus diseños
Mitsubishi, Mazda, Toyota y, sobre todo, Nissan, han incorporado distintos elementos de la cultura del país en sus prototipos y se esfuerzan en establecer una imagen de marca.
El primero en decirlo -y también el más explícito- ayer en el 37 Salón del Automóvil de Tokio fue el presidente de Nissan, Carlos Ghosn. El ejecutivo brasileño-francés, en una estruendosa presentación, aseguró que los nuevos modelos de la compañía contarán con un denominador común, que calificó de 'ADN japonés'.
Tanto los prototipos presentados ayer como los modelos lanzados en los últimos meses muestran, según los directivos de la compañía, estos avances en el diseño. Ghosn presentó el último concepto de la compañía, el C-Note, un compacto de cinco asientos que combina 'espacio y confort', además de otros seis modelos.
Mitsubishi, controlado por Daimlerchrysler en un 36,97%, siguió por la línea marcada por Ghosn. El presidente y consejero delegado de la compañía, Rolf Eckrodt, habló, al presentar los ocho modelos que ha traído a la muestra, de la necesidad de crear una 'marca Mitsubishi', con 'un diseño distintivo y un estilismo emocionante'. Algo parecido a lo que sucede con Mazda, fabricante que estableció en 1997 la 'consecución de una marca' como una prioridad principal.
Un portavoz de Toyota, el tercer mayor fabricante del mundo, aseguró que estos movimientos de sus rivales son sólo estrategias para arañar la cuota de mercado del 42% con que cuenta en el mercado doméstico. Aun así, el fabricante también mostró esfuerzos en el diseño.