Morgan Stanley apuesta por mayores convulsiones monetarias
El dólar prosigue en senda bajista. Las conclusiones a las que llegaron los ministros del G-7 hace dos fines de semana siguen pesando sobre el mercado de divisas y las Bolsas. El billete verde se desplomó ayer hasta marcar las 1,1590 unidades euros y 110,85 por yen en el momento de cierre en Europa. Los analistas comentaron que este nuevo recorte no obedece a una noticia concreta, sino más bien a movimientos técnicos. No obstante, las opiniones sobre la evolución del dólar en los próximos meses sigue siendo negativa en ciertas casas de análisis de peso.
La última en poner el dedo en la llaga ha sido Morgan Stanley. Los expertos de esta firma de inversión consideran que la reunión del G-7 ha supuesto un acontecimiento 'claramente positivo para la economía mundial, porque ha apostado por el largamente esperado reajuste del dólar'. A su juicio, la caída del dólar no ha hecho más que empezar. Atendiendo al tipo de cambio efectivo real en un sentido amplio el dólar se ha depreciado un 8% desde los máximos registrados a principios de 2001. 'En el contexto de un ajuste en toda regla del balance por cuenta corriente, cabe esperar una caída aproximadamente tres veces superior, circunstancia que subraya el largo camino que tiene ante sí el proceso de reajuste global', dicen.
Japón, la más perjudicada
Morgan Stanley opina que el mecanismo de ajuste del dólar recaerá en gran parte sobre Japón.
Merrill Lynch emitía un informe reciente en el que auguraba también una mayor caída del dólar. Para sus expertos, la reunión del G-7 sugirió que los ministros de estos siete países están de acuerdo en que una caída ordenada y guiada por el mercado tiene que ocurrir. Para Merrill Lynch, el dólar tiene que retroceder hasta las 90 unidades de yen y 1,31 unidades de euro.