El fisco francés exigirá datos de los abonados a las televisiones de pago
La Administración francesa, necesitada de ingresos, endurecerá la caza de los evasores del impuesto televisivo para nutrir sus arcas. Las televisiones de pago deberán facilitar al fisco nombre, dirección y fecha de suscripción de sus clientes, que se compararán después con la lista gubernamental de los ciudadanos, que abonan los 116,5 euros anuales por mirar la televisión. El nuevo dispositivo, incluido de forma discreta en los presupuestos del año próximo, espera recaudar 70 millones de euros de los 230 millones que cada año pierde el Estado por fraude, cifra nada desdeñable para un Gobierno en apuros.
La medida supone una vuelta de tuerca más para luchar contra la evasión de un impuesto que financia hasta el 80% de las cadenas públicas de radio y televisión. Hasta ahora, la Administración sabe de los potenciales consumidores de televisión a través de los vendedores, obligados a facilitar el inventario de sus clientes. Además, se exige a los inquilinos informar de la posesión de un aparato de televisión mediante un formulario. Un sistema complejo y caro de mantener, que vio cerca su supresión hace dos años, cuando la Asamblea Nacional lo consideró 'ejemplo de impuesto arcaico, injusto y costoso'.
Subvenciones
Sin embargo, absorbe gran parte de la subvención estatal de la televisión y radio públicas. Y, dada la situación financiera del Estado, 2.085 euros, los recaudados en 2002, siempre vienen bien. El informe de la Asamblea Nacional de julio eliminó los despectivos adjetivos hacia este impuesto para proponer una mejor lucha contra el fraude, que podía incluir la 'comparación de los datos' del actual fichero del Gobierno con 'las suscripciones a la televisión por cable', siempre que fuera posible jurídicamente.
De ser aprobada por el Parlamento, la nueva Ley de Presupuestos lo permitirá a partir del 1 de enero del próximo año. Ahora quedará por ver si los seis millones de abonados a televisiones de pago en Francia anularán sus suscripciones para no estar fichados por el fisco.