Un grupo de expertos elabora una guía que recopila los principios del buen gobierno
El presidente del Gobierno, José María Aznar, asistió ayer a la reunión del patronato de la Fundación de Estudios Financieros. Durante la reunión la fundación presentó una guía de principios de gobierno corporativo que pretende servir de herramienta de trabajo para todas las empresas españolas, con independencia de su dimensión o sector de actividad.
Son muchos los que hablan de buen gobierno corporativo, pero aún son pocos los que saben exactamente qué hacer para cumplir tanto con las normas de obligado cumplimiento que dicta la ley de transparencia, como con el resto de las recomendaciones derivadas en España del Código Olivencia o del Informe Aldama.
Esta falta de concreción en lo referente a las reglas de aplicación en materia de gobierno corporativo por parte de las sociedades ha sido una de las razones que han llevado a la Fundación de Estudios Financieros a elaborar una Guía de principios de buen gobierno corporativo, transparencia normativa y conflictos de interés en las sociedades cotizadas.
Su presidente, Aldo Olcese, que tuvo la oportunidad de presentar los trabajos de la fundación ante el presidente del Gobierno, José María Aznar, y el ministro de Economía, Rodrigo Rato, entre otras personalidades, aseguró ayer que la guía tiene como objetivo servir de ayuda a todas las empresas, 'cotizadas o no, grandes, medianas o pequeñas'. José María Aznar, que también es presidente de honor de la Fundació, aseguró durante la presentación que 'las empresas deben ser libres de competir en unos mercados cada vez más abiertos, pero al mismo tiempo deben basar su gestión en los principios de transparencia y buen gobierno'.
La Fundación de Estudios Financieros tiene previsto hacer llegar su guía a todas las empresas cotizadas, reguladores, supervisores, organizaciones empresariales y al Instituto de la Empresa Familiar, porque, en opinión de Aldo Olcese, la aplicación de la guía es válida para todo tipo de empresas. 'Quizá no todos los principios, pero sí una buena parte de ellos debería ser aplicable a todas las empresas con un determinado tamaño, y no sólo a las cotizadas'.
El presidente de la Fundación de Estudios Financieros considera que existen tres formas de entender el gobierno corporativo. Hay quienes creen que es una obligación. 'Por suerte, cada vez son menos las empresas que piensan esto'. También están quienes opinan que es una garantía de defensa de los inversores. Y, en tercer lugar, quienes consideran que el buen gobierno mejora la eficiencia de las empresas. Para el Instituto de Estudios Financieros esta última es la forma correcta de entender el gobierno corporativo. 'La protección de los intereses de los accionistas debe ser una consecuencia de la mejora de la eficiencia de las empresas', explica Olcese.
La guía de buen gobierno de la Fundación de Estudios Financieros tiene como objetivo sistematizar todo lo que se conoce sobre buen gobierno corporativo. 'Hemos cogido lo mejor de Olivencia, de Aldama, de Higgs, de Cadbury..., lo mejor de diferentes códigos y lo hemos plasmado en un manual que trata de ser un elemento de divulgación y de consolidación del buen gobierno corporativo', señala Aldo Olcese.
El manual trata de ser una ayuda para las empresas con menos recursos. 'No todas las sociedades se pueden permitir contratar a un bufete de expertos para que les diseñe un manual de buen gobierno a la medida'.
La nueva guía es, según la Fundación, el resultado de todos los trabajos elaborados por esta institución en materia de gobierno corporativo, desde el inicio de sus actividades el año pasado.
Entre estos trabajos destaca una encuesta realizada entre los principales directivos de las empresas españolas en la que reconocían, entre otras cosas, que el papel jugado por los consejos de administración en la vida de las empresas españolas era insuficiente.
Un modelo de ahorro a largo plazo para Europa
Al margen de los trabajos relacionados con el buen gobierno, la fundación lleva a cabo otras investigaciones. Entre ellas, analiza la reforma de los mercados de capitales europeos. La intención es 'tomar el pulso' al proceso regulatorio europeo en la 'imprescindible' convergencia de este sector. El informe estará listo a finales de este año. Y entre los deberes para el próximo ejercicio, destacan el estudio sobre un nuevo modelo de ahorro a largo plazo para Europa y la reforma de los sistemas de pensiones. Además, pretenden analizar el private equity en Europa y la financiación estructural en capital para un desarrollo económico sostenido. También analizarán el papel del G-8 y si conviene o no a España estar en este organismo.
La contabilidad internacional aportará más transparencia
A partir de enero de 2005 los grupos de sociedades cotizadas de la Unión Europea deberán elaborar sus cuentas anuales bajo los estándares del International Accounting Standards Board (IASB). Desde la fundación se considera que la introducción de las normas contables internacionales supone un 'proceso revolucionario que va más allá de las simples técnicas contables y que impedirá la llamada contabilidad a la carta, que se ha utilizado en determinadas ocasiones para regular sectores estratégicos'.El presidente de la fundación asegura que las normas internacionales de contabilidad van a convertirse 'en un principio de transparencia de los buenos', de los que el organismo que preside hará un seguimiento anual.
Una oportunidad para la autoevaluación y el premio
Lo mejor para saber si las empresas lo están haciendo bien es que ellas mismas analicen sus puntos fuertes y los que requieren de refuerzo. æpermil;ste es el objetivo del Observatorio de Gobierno Corporativo, una de las iniciativas que ha puesto en marcha la Fundación de Estudios Financieros y que verá la luz durante los primeros meses del próximo año.El observatorio, que cuenta con la colaboración científica de investigadores de la Universidad de Oviedo y de otros expertos independientes, permitirá la evaluación de las prácticas de gobernanza en las empresas con una periodicidad anual.Además, la fundación tiene la intención de premiar a las empresas con mejores prácticas en el buen gobierno corporativo.