El 'no' de Suecia al euro, un golpe a la élite política
El no ha sido un duro golpe para la élite. El primer ministro sueco, Goran Persson, líder de la campaña del sí, ha perdido parte de su prestigio ahora que la mayoría de los suecos han votado contra el 80% de los parlamentarios suecos (...).
Henrik Brors editor de asuntos políticos del periódico ofrece razones por las que ha salido el no: desde que Suecia entró en la UE, en 1996, los partidos partidarios del sí no han sabido entender el escepticismo hacia la UE (...). Esto, junto a la idea de que dejar nuestra política monetaria en manos del BCE sería negativo, ha unido a votantes de distintos partidos políticos en el no.