Lusotur busca un socio en España para impulsar dos complejos en Portugal
El grupo inmobiliario Lusotur propiedad de la familia portuguesa Jordan ha decidido ampliar su actividad -hasta ahora sólo vendía parcelas en los dos complejos que tiene- y entrar en la construcción y promoción de cerca de 6.600 viviendas turísticas en terrenos que aún conserva sin edificar.
Por un lado, Lusotur pretende edificar 5.000 viviendas en cerca de 600.000 metros cuadrados en Vilamoura, localidad situada en el Algarve. La inversión requerida para realizar este proyecto, 'el más grande de Portugal', según su consejero delegado, Gilberto Jordan, podría rondar los 600 millones de euros. Por el otro, proyecta edificar otras 1.600 viviendas de lujo en el otro complejo, situado en Clube de Campo, en Sintra, y que cuenta con 465 hectáreas.
Para hacerlo posible, Lusotur busca un grupo inversor en España que le permita, con su respaldo financiero, realizar la construcción, promoción y venta de estas casas vacacionales, apunta Jordan. 'Si no apareciera este socio, añade, el grupo portugués no descarta unirse a empresas promotoras o grupos turísticos que estén interesados en participar con su financiación y su conocimiento en todo este proceso'.
De momento, el grupo inmobiliario Prasa, de origen español, ya ha mostrado su interés por participar en la promoción y edificación de 500 viviendas a un precio de 900 euros el metro cuadrado. 'Pensamos que existen empresas en España que encajan con nuestro perfil', señala Jordan. 'Prasa es un ejemplo'.
En Vilamoura también se abrirán seis hoteles. Dos de ellos ya tienen dueño. Se trata del grupo luso Amorin, que ha acordado con el grupo francés Accor la gestión de uno de ellos, y de la compañía Tivoli, con gran presencia en el país vecino.
1.650 hectáreas
En diciembre de 1995 la familia Jordan tomó el control de Lusotur, compañía propietaria del complejo de Vilamoura. æpermil;ste cuenta con 1.650 hectáreas y tres kilómetros de playa. Alberga 7.000 viviendas, cuatro campos de golf, seis hoteles, un puerto deportivo y cinco apartoteles.
El complejo, que da empleo a 7.000 personas, generó unos ingresos de 5,4 millones en 2002 y un Ebitda de 1,6 millones sólo por su actividad del puerto y la playa. Por los campos de golf, la compañía ingresó 11,4 millones de euros y tuvo un beneficio operativo de 4,9 millones. En infraestructuras, Lusotur lleva invertidos en este complejo 70 millones de euros.
También el grupo luso Imocon participa en la construcción de 300 viviendas turísticas. El precio de los inmuebles construidos se sitúa en torno a los 3.500 euros por metro cuadrado.
Para dar respuesta a las numerosas consultas planteadas por los inversores, el grupo portugués ha designado al banco de inversión UBS como asesor de sus proyectos.
La sociedad lleva vendidos a promotoras nacionales e internacionales 320.000 metros cuadrados de suelo edificable (incluidos los terrenos destinados a dos hoteles de cinco estrellas), por lo que quedan 600.000 metros cuadrados por edificar. Precisamente es en esta construcción donde Lusotur quiere participar si aparece un nuevo socio financiero que le ayude a impulsar el negocio.
Belas Clube de Campo, su otra urbanización de lujo muy cercana a Lisboa, tiene 465 hectáreas.
A Portugal llegaron 12 millones de turistas en 2002, de ellos, la mitad procedió de España. Sin embargo, no son los españoles los que más se animan a comprar este tipo de parcelas. Los ingleses ocupan el primer puesto en esta clasificación, seguida de los propios portugueses.