La economía de la eurozona se sitúa al borde de la recesión
Los datos publicados ayer 'confirman que el crecimiento en la primera mitad del año ha sido decepcionante', aseguró Gerassimos Thomas, portavoz del comisario de Asuntos Económicos, Pedro Solbes. La oficina europea de estadísticas Eurostat revisó ayer a la baja el crecimiento de toda la primera mitad del año. El PIB registró un crecimiento cero en el primer trimestre, frente al 0,1% estimado inicialmente, y cayó el 0,1% entre abril y junio, frente al estancamiento apuntado con anterioridad.
Es la primera vez desde el último trimestre de 2001 que la eurozona registra un crecimiento negativo, pero la situación entonces no fue tan crítica. Alemania, Italia, Holanda y Portugal se encuentran en recesión y Francia, Bélgica, Dinamarca y Noruega registraron un descenso del PIB en el segundo trimestre. En la última década, nunca tantos países europeos registraron tan malos resultados a la vez.
Las expectativas para los próximos meses no son muy optimistas, pese a lo cual la Comisión habla de 'aceleración del crecimiento'. Bruselas calcula que el PIB de los Doce crecerá entre el 0% y el 0,4% en este trimestre y entre el 0,2% y el 0,6% en el último cuarto del año.
Con esas cifras en la mano, la previsión de lograr un anémico crecimiento del 0,7%, previsto por la Comisión para este ejercicio, resulta inalcanzable. Pero Bruselas no oficializará su revisión del cuadro macroeconómico hasta que se lo comunique a los ministros de Economía, en la reunión que el Eurogrupo celebrará este fin de semana en Italia.
Fuentes de la Comisión y del Banco Central Europeo (BCE) cifran la nueva estimación para el PIB en el 0,5%. Una cifra que incluso puede resultar optimista si el deterioro de las principales economías de la región persiste o si la recuperación estadounidense, motor del crecimiento mundial, se malogra.
'La aceleración en el crecimiento previsto para el cuarto trimestre se basa en la reciente mejora de la confianza interna, así como en factores externos amparados por la subida del índice de gestores de compras de la industria de EE UU', dijo la Comisión en su comunicado.
La debilidad generalizada del crecimiento agravará, al mismo tiempo, los desequilibrios presupuestarios en la eurozona y agudizará la crisis ya abierta en torno al cumplimiento del Pacto de Estabilidad.
Eichel promete dureza ante Bruselas
El ministro de Finanzas alemán, Hans Eichel, presentó ayer ante el Parlamento el proyecto de presupuestos para 2004, a su juicio, 'el que más riesgos contiene' de todos los que ha elaborado durante su mandato, porque 'no está asegurado' el crecimiento del 2% sobre el que se construye la distribución de ingresos y gastos.Los peligros enumerados por Eichel van de la persistente debilidad coyuntural al bloqueo de las reformas del Gobierno por parte de la oposición y los sacrificios que, desde su punto de vista, conllevará la ampliación europea.En este punto, Eichel lanzó un claro mensaje. 'Nosotros también podemos negociar de la misma forma en que lo hace el jefe del Gobierno español' en defensa de las ayudas que percibe la UE, informa Efe. El ministro aludía a los beneficios que comportará la ampliación, pero también a los grandes costos, especialmente para los contribuyentes netos. En algunas discusiones presupuestarias en Bruselas se ha criticado el alarde español del equilibrio presupuestario, logrado en parte por los recursos recibidos de la UE, mientras que potentes contribuyentes netos registraban numeros rojos.Esa dureza que anticipa Eichel se puede trasladar al debate sobre el Pacto de Estabilidad. 'En la actual situación de debilidad, debe permitirse que trabajen los estabilizadores automáticos. Con un clima de debilidad económica, lo importante es no exacerbar la situación con ahorros adicionales', explicó Eichel.El ministro criticó a la oposición y le acusó de poner en riesgo el incumplimiento en 2004, y, por tercer año consecutivo, del objetivo de déficit por el bloqueo de las reformas propuestas por el Ejecutivo.'El déficit del sector público, según criterios de Maastricht, alcanzó el año pasado los 74.000 millones de euros, este año probablemente será algo mayor y, si no tomamos medidas, será del mismo orden el próximo año', dijo Eichel.El instituto económico IWH calculó ayer que el déficit alcanzará este año el 4,1% del PIB y el año que viene no bajará del 3,9%.Los democristianos acusaron al Gobierno de elaborar un presupuesto sobre asunciones optimistas e irreales, pero su portavoz Friedrich Merz, no indicó el sentido del voto.