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Telecom Italia, más cerca de la fusión con Olivetti

Los dueños de Telecom Italia llegarán a la junta de accionistas de hoy con todas las papeletas para conseguir el apoyo mayoritario que necesitan para materializar el proyecto de fusión con Olivetti.

Pirelli, Benetton y el presidente de la operadora, Marco Tronchetti, respiraron ayer tranquilos después de que un juzgado de Milán desestimara la reclamación más contundente de los accionistas disidentes, liderados por el fondo Liverpool Limited Partnership. Este grupo solicitó a las autoridades judiciales que impidieran a Olivetti votar en la junta, ya que argumentaban que Olimpia -una de las muchas empresas que forman el conglomerado poseedor de Telecom Italia- había sobrepasado el 30% del capital de Olivetti y estaba obligada, por tanto, a lanzar una opa.

Un día antes de este fallo, la comisión de la Bolsa italiana, a la que también apelaron los críticos, dictaminó en el mismo sentido que el juzgado de Milán.

Olivetti, por tanto, podrá hacer valer en asamblea el 55% de las acciones con derecho a voto que tiene en Telecom Italia, lo que le garantiza casi la mayoría de dos tercios que necesita para sacar adelante la fusión.

Accionistas minoritarios de Telecom Italia se han opuesto frontalmente a su unión con Olivetti desde que fue anunciada, a mediados de marzo. A su juicio, la operación infravalora la telefónica y sólo tiene por objetivo utilizar la importante generación de caja de Telecom Italia para enjugar la abultada deuda de Olivetti.

Tronchetti, sin embargo, ha repetido reiteradas veces que el acuerdo es bueno para los accionistas y que su único objetivo es clarificar la compleja estructura del grupo.

Después de la votación de los accionistas de Telecom Italia serán los socios de Olivetti los llamados a pronunciarse, en una cita prevista para el lunes. Pero en este caso no se prevén problemas, puesto que los analistas coinciden en que Olivetti sale beneficiada del pacto.

Nuevas medidas

La probable victoria de Tronchetti en ambas citas puede verse parcialmente enturbiada si, como está previsto, los fondos de inversión que se oponen a la fusión siguen su batalla. La integración, prevista para finales de julio, podría retrasarse con acciones legales. El grupo disidente ha convocado una asamblea de los accionistas sin derecho a voto de Telecom Italia para el 9 de junio, en la que planean votar en contra de la fusión. Los fondos que se oponen al acuerdo representan sólo el 5% de los títulos con derecho a voto, pero aseguran estar en posesión del 25% de las acciones sin esos derechos.

Con el voto en contra de estos accionistas en la mano, los opositores volverían al juzgado para pedir la suspensión de la fusión, con el argumento de que sus intereses han sido dañados y sus opiniones, ignoradas.

Las acciones de Telecom Italia cayeron con fuerza cuando se anunció el acuerdo, pero desde entonces han recuperado posiciones al calor de la oferta de recompra de títulos que incluye.

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