La Bolsa encadena tres semanas de alzas y acaricia los máximos
El Ibex logró ayer un avance del 1,1% después de tantear terreno positivo y negativo durante la sesión. El volumen de negocio, ya débil, fue de los más bajos del año, con 786,97 millones netos, a pesar del vencimiento de futuros.
La Bolsa ha encadenado, con todo, la tercera semana consecutiva de ganancias. Ha conseguido una revalorización del 2,05%, con lo que acumula un avance del 12% en el mes y del 8,90% en lo que va de año.
En la semana que terminó ayer a efectos bursátiles, el Ibex también ha logrado superar en intradía el nivel más alto de 2003, pero con precios de cierre se sitúa un 0,54% por debajo de éste.
La de ayer fue una jornada para los grandes valores y los bancos. BBVA se colocó a la cabeza con un avance del 2,78%. La semana la termina con un avance del 3,93%, pese a que Merrill Lynch recomendó vender.
SCH, por su arte, cerró con subida del 2,04% en el día y del 4% en las cuatro últimas jornadas. JP Morgan se muestra, asimismo, pesimista con el valor y acaba de aconsejar infraponderarlo al alcanzar el precio objetivo que estimaban para cada acción (6,10 euros). Ferrovial, Prisa, Sogecable y Telefónica sumaron un 2,67%, 1,53%, 1,76% y 1,21%.
Arcelor ha sido la compañía con mayor número de compras dentro del Ibex. Ha alcanzado una revalorización del 16,84% en la semana tras recibir una penalización del 0,95% la anterior. Metrovacesa se ha situado en el otro extremo, con un recorte del 10,23%.
Concluidos los movimientos especulativos en torno a la invasión a Irak por los aliados angloestadounidenses, las Bolsas han vuelto a fijarse en los fundamentos económicos. En concreto, en los resultados empresariales de Wall Street, el mercado más madrugador en este sentido. Otras variables, como los índices de confianza de los consumidores o los de producción industrial han pasado inadvertidos.
'Los resultados de las empresas estadounidenses marcan la tendencia de las Bolsas en los últimos días y así seguirá en las dos próximas semanas', dice Daniel Toledo, analista jefe de una firma de Bolsa. 'Hay que tener la cabeza muy fría para no dejarse llevar por la tendencia del momento, con los niveles de volatilidad en alza. Los resultados conocidos hasta ahora no aportan datos relevantes respecto a las valoraciones del S&P 500', añade.
Francisco Torrecilla, gestor de patrimonios, señala que 'los mercados han vuelto a repetir los mismos movimientos de los últimos años en lo que respecta a las valoraciones de los resultados de las empresas. Hay mucha premura y mayor especulación cuando las compañías emblemáticas hacen públicas sus cuentas. Los especuladores sólo atienden las referencias previas, es decir, si los resultados se ajustan a los anuncios o si se producen desviaciones al alza o a la baja. Esto puede conducir a equívocos más tarde, porque nadie valora si los resultados son buenos o malos y, por supuesto, si las cotizaciones actuales se ajustan a estas cuentas en términos de PER'.
Los bancos de inversión cuestionan la recuperación
Después de la invasión a Irak, los fundamentos económicos y empresariales vuelven a copar el interés de inversores, operadores y expertos. ¿Están las Bolsas caras o baratas? La pregunta hoy, como ayer, como mañana, es la misma. La respuesta, también, porque los sentimientos están enfrentados. Alcistas y bajistas, optimistas y pesimistas, a la greña. Unos a favor y otros, en contra. Es la ley de la Bolsa. De no ser así, todo sería coser y cantar.Hay analistas, no obstante, que mantienen actitudes firmes, sin grietas, pase lo que pase, sea cual fuere el ritmo de los acontecimientos y el perfil de los principales índices. Lo importante, dicen los mejores estrategas, es mantener la calma y la cabeza fría.Entre las proyecciones de última hora destacan las de Schroders Investment Managers. Los especialistas de este banco de inversión aseguran que, pese a que la renta variable ha subido con mucha fuerza desde que comenzaron los ataques de las fuerzas aliadas contra Irak, nada fundamental ha cambiado. La gestora, que ha reducido un 1% el peso de la Bolsa en su cartera, afirma, además, que no habrá un comportamiento alcista sostenido en el mercado de acciones hasta que las valoraciones fundamentales recojan un descuento a largo plazo. La firma añade que, incluso si hubieran positivas sorpresas económicas y empresariales, éstas no justificarían las valoraciones actuales ni el regreso de los fondos al mercado de renta variable. Un jarro de agua fría, en fin, para los ánimos, más calenturientos.Goldman Sachs también está del lado de los más pesimistas. La firma de inversión tiene serias dudas de la recuperación que han experimentado los mercados desde que los Ejércitos de la coalición tomaran Bagdad y se publicaran los primeros resultados empresariales.Goldman Sachs tiene dudas de que esta mejora se convierta en una recuperación sustancial y considera que la recuperación económica vendrá más de la zona euro y no tanto de EE UU.Hay, en cualquier caso, firmas de inversión que consideran lo contrario. ¿Quién tiene la razón? Los sabios dicen que el mercado es soberano y que siempre tiene la razón, que es lo mismo que decir que tanto los alcistas como los bajistas pueden estar equivocados, porque mandan los resultados al instante. Es la ley de la Bolsa.