La euforia inicial se desvanece y Wall Street sólo sube el 0,28%
Las mercados siguen moviéndose al compás de las últimas noticias que llegan de Irak. Las conquistas de las tropas aliadas y la toma de posiciones en Bagdad fueron motivos suficientes para desatar otra sesión compradora en Estados Unidos. Los inversores parecen confiar en ver el fin del conflicto muy pronto y los avances se impusieron desde el inicio de la sesión. Un comportamiento que dio continuidad a las ganancias moderadas acumuladas durante la semana precedente.
La euforia dominó en el arranque de la jornada aunque las ganancias se suavizaron con el paso de las horas y las ventas se concentraron en los últimos compases de la sesión.
El Dow Jones cerró con un alza del 0,38% tras llegar a ganar un 2,9% en el mejor momento del día. El S&P 500 registró un comportamiento similar y recortó la subida inicial al 0,15%. El avance, no obstante, permitió que volviera a las ganancias en el ejercicio. Gana un leve 0,04% en 2002 tras llegar a acumular una pérdida cercana al 9% a mediados de marzo. El Nasdaq también vivió una jornada de más a menos y el avance quedó reducido al 0,53%.
Las fuerzas de Estados Unidos penetraron el lunes en Bagdad y entraron en dos palacios del presidente Sadam Husein, mientras las tropas británicas tomaron el control de la mayor parte de la ciudad sureña de Basora, la segunda en importancia en Irak. Noticias que animaron los mercados.
Muchos analistas muestran poca confianza en el rebote. Algunos reconocen que el optimismo puede durar unos días, aunque recomiendan deshacer posiciones aprovechando las subidas, consejo que tomaron algunos inversores ayer.
Otros manejan la teoría de que, una vez finalice el conflicto bélico, el consumo y la inversión empresarial mejorarán sustancialmente. Tendencias que facilitarán el comienzo de la recuperación, amenazada durante meses por las incertidumbres que generaba la guerra.
Los resultados serán clave
Los últimos datos económicos conocidos la semana pasada muestran un escenario poco esperanzador. La destrucción de empleo y la contracción industrial y de servicios siguen a la orden del día. Morgan Stanley, por su parte, pronosticó una recesión mundial recientemente sea cual fuere la duración del conflicto.
Merrill Lynch considera que los inversores deberían tomar posiciones 'más conservadoras', según explicó la firma en una nota enviada a sus clientes. La casa de análisis considera que existen un 50% de posibilidades de que la economía estadounidense entre en recesión y un 90% de probabilidad de malos resultados.
Los resultados empresariales serán la siguiente prueba para los mercados. La presentación de las cuentas de los primeros tres meses del año se intensificará después de la Semana Santa para dar más pistas sobre el impacto del conflicto y el estado de la economía.
Algunas empresas, con todo, ya han empezado la temporada de resultados. Alcoa, la primera del Dow Jones, anunció el pasado viernes una caída de beneficios del 31% como consecuencia del aumento de los gastos de energía y la debilidad de la demanda. Los resultados, con todo, superaron las previsiones y el mercado premió a la compañía con un alza del 8,48% ayer.
Tampoco se descarta que esta semana esté cargada de advertencias sobre resultados, aunque de momento la guerra sigue centrando todo el interés. Siebel Systems, por ejemplo, advirtió el viernes al cierre del mercado que las ventas del primer trimestre no alcanzarán las expectativas, pero la compañía aprovechó la tendencia alcista del día y ganó el 2,71%.
Las recomendaciones favorables también beneficiaron a otras empresas. AOL Time Warner (+5,45%) destacó después de que Morgan Stanley mejorara la opinión sobre la compañía.
El buen comportamiento de las Bolsas se vio compensado por caídas en la renta fija y el oro. El precio del bono a 10 años retrocedió y la rentabilidad, que se mueve a la inversa, subió al 3,985%. El oro, por otra parte, cotizaba a 322,4 dólares por onza.
La caída del precio del crudo también favoreció a ciertos sectores como las aerolíneas. AMR ganó el 5,32%.