La conservación es rentable
En el año 1982 la empresa Stachys de Barcelona inició un proceso de sectorización de una actividad que, hasta entonces, no era sino una parte más de la construcción de infraestructuras. La compañía realiza sus proyectos en obras que afectan al paisaje urbano e interurbano y es la primera pequeña empresa española especializada en la actividad de la restauración paisajística y medioambiental con certificado de calidad, una garantía para los clientes y una valiosa herramienta de gestión para sus responsables.
La conservación del medio físico abrió las puertas a una labor profesional acorde con las nuevas sensibilidades derivadas de los grandes impactos en el sector de la construcción y las obras públicas.
La restauración ambiental a finales de los ochenta deja de ser un simple fin de obra obligatorio para convertirse en una actividad especializada. El nivel de exigencias sociales que acompaña a toda gran obra requiere la configuración de un nuevo marco donde se reconozcan espacios a cada uno de los elementos que desarrollan el proyecto (constructoras, empresas de restauración ambiental, etc.) y que permita desarrollar el principio de calidad imprescindible en un mercado global como es éste.
Stachys centra su actividad en dos grandes áreas: la integración o restauración ambiental y las actuaciones de acabado de obra civil, como la estabilización de taludes o la ordenación urbana. Actividades que antes eran meras obligaciones y que hoy constituyen un mercado único. Además, esta pyme es la primera del sector que adapta su sistema de gestión interno a las normas comunitarias UNE-EN ISO 9002-96 e ISO 14001-96, integrando los sistemas de calidad, medio ambiente y prevención de riesgos laborales.
Esto ha posibilitado que actualmente goce de la confianza de la Administración en Cataluña, para la que ha realizado trabajos importantes. Hay que destacar especialmente la ejecución de la recuperación del vertedero de residuos sólidos urbanos, que Stachys transformó en el Jardín Botánico de Barcelona, así como la redacción del proyecto ejecutivo y la ejecución de las obras accesorias y las plantaciones. El proyecto, realizado en poco más de seis meses, dividía el entorno del jardín en función de los diferentes tipos de vegetación del planeta.
Otra actuación importante fue su participación en el eje transversal de Cataluña, donde puso en práctica la integración ambiental mediante la hidrosiembra de más de un millón de metros cuadrados de taludes, la plantación de 194.000 unidades arborícolas y arbustivas, etc. Esta obra ha concedido gran importancia a las medidas correctoras de impacto ambiental, situándose entre las más importantes de Europa, tanto por su volumen como por las revolucionarias técnicas utilizadas.
Otra de las peculiaridades de esta empresa es su esfuerzo por integrar laboralmente a personas con minusvalías, a través del Programa Posàt a punt, durante la ejecución de las obras de ajardinamiento, reurbanización y posterior mantenimiento en diferentes zonas del barrio de Camps Blanc en San Boi. Para la realización de estos trabajos, el 50% de la mano de obra está conformada por colectivos tales como minusválidos, inmigrantes, personas en proceso de reinserción social, etc.
Durante estos veinte años, Stachys ha ido incrementando su volumen de negocio, alcanzando 18.838.423 euros de facturación durante el ejercicio de 2002, con una plantilla de 120 trabajadores. Todo ello en un sector que ahora cuenta con un mercado donde la competencia es excelente y la especialización contribuye a su potenciación gradual. El medio ambiente demuestra que puede ser rentable también desde el punto de vista económico.