España ocupa el puesto 25 en nuevas tecnologías
España ocupa el lugar 25 entre las 85 economías mundiales con mayor grado de desarrollo tecnológico, según un informe publicado ayer en Ginebra por el Foro Económico Mundial, el Programa de Información para el Desarrollo del Banco Mundial y la escuela francesa de ciencias empresariales Insead. El informe clasifica un total de 85 países según su grado de preparación para aprovechar al máximo los beneficios de esas nuevas tecnologías.
Finlandia ocupa el primer lugar absoluto del índice por sus excelentes resultados en el empleo de nuevas tecnologías, tanto por parte de los ciudadanos como por las empresas y el Gobierno, mientras que Estados Unidos cae del primer al segundo lugar por ser menos competitivo en cuanto a conexiones y difusión de las tecnologías de la información y la comunicación.
Por su parte, Singapur ha dado un gran salto desde la octava a la tercera posición, e incluso es primera en cuanto al marco regulatorio y político y a la disposición del Gobierno a emplear esas tecnologías, tanto en sus procesos internos como en la oferta de servicios.
Alemania ocupa el octavo puesto por disponibilidad de redes aunque es líder en lo que se refiere al empleo de esas tecnologías en las empresas.
En la lista general, tras Finlandia, EE UU y Singapur, figuran Suecia, Islandia, Canadá, el Reino Unido, Dinamarca, Taiwán, Alemania, Holanda, Israel, Suiza, Corea, Australia y Austria.
Por delante de Italia
Francia está en el puesto 19, inmediatamente delante de Japón, mientras que España ocupa el número 25, por delante de Italia, Luxemburgo, República Checa y Brasil. China ocupa el puesto número 43, aunque ha dado un salto cualitativo en los últimos tiempos, que no se refleja todavía en el estudio, según reconocieron sus autores.
Brasil ocupa el primer lugar de Latinoamérica de una lista de 82 países clasificados, según su capacidad para el más pleno aprovechamiento de las tecnologías de la información y la comunicación.
Los criterios utilizados en el informe para clasificar a los diferentes países según su grado de competitividad tecnológica están directamente relacionados con la calidad del entorno tecnológico, es decir, las condiciones del mercado, el marco político y reglamentario y las infraestructuras disponibles, así como el grado de aceptación de los particulares, las empresas y los poderes públicos, y su nivel de utilización de las tecnologías de la información y la comunicación.
Durante la presentación del estudio, el director ejecutivo del Foro Económico Mundial, José María Figueres, afirmó que las tecnologías de comunicación e información pueden ser un instrumento en extremo valioso para el crecimiento económico de los países en desarrollo y una más eficaz participación en el comercio mundial.