Bruselas insta a Puigneró a devolver ayudas de 104 millones
La Comisión Europea (CE) ordenó ayer al Gobierno español que recupere los 104 millones de euros que Hilados y Tejidos Puigneró adeuda a la Seguridad Social y Hacienda en el expediente de suspensión de pagos presentado en noviembre de 2000, con unas deudas globales de 156 millones. El organismo europeo también exigió la recuperación de otros 21,6 millones en concepto de dos préstamos y dos avales concedidos por la Generalitat de Cataluña entre 1993 y 2000, a través del Instituto Catalán de Finanzas (ICF). Este organismo público no quiso comentar la situación.
La CE consideró, en un comunicado emitido ayer, que las garantías e hipotecas alcanzadas por la Agencia Tributaria y la Seguridad Social y los créditos concedidos por el ICF no han obtenido las garantías mínimas de devolución y, por lo tanto, 'todas estas medidas suponen una ayuda estatal' y que 'España está obligada ahora a exigir al beneficiario que devuelva esta ayuda'.
El comisario de Competencia, Mario Monti, propuso (después de una denuncia de unos competidores de Puigneró) en septiembre de 2001 la apertura de una investigación por parte de la CE sobre un crédito de 12 millones de euros del ICF a la primera compañía de hilados española. Posteriormente, esta investigación se ha ampliado a toda la negociación del convenio de suspensión de pagos.
Devolución pactada
Por su parte, el director general de la compañía textil, Pere Puntí, afirmó ayer que la devolución de las deudas a los organismos públicos 'ya está pactada en el convenio de la suspensión y que los créditos también se devolverán en su día'.
Puntí remarcó que 'no vemos como negativo este comunicado de la CE. Estamos de acuerdo en que algunas cosas se hicieron mal en tiempos pasados, pero considero que en otros apartados la Comisión apoya la gestión realizada durante los dos últimos años'.
Puntí espera que el Juzgado número 4 de Vic (Barcelona) publique el convenio definitivo para levantar la suspensión de pagos a mediados de marzo. La compañía ha cerrado dos factorías dentro del plan de viabilidad iniciado, clausurando la hilatura y concentrando la producción en la planta de Sant Bartomeu del Grau (Barcelona).