El tramo Ayamonte-Huelva, sin salida directa al mar

La construcción de las grandes infraestructuras de transporte se compone, tal y como les gusta recordar a los expertos, de la red arterial, formada por las conexiones principales y la red capilar, que consta de los accesos secundarios. En casi todos los casos, las primeras son competencia del Estado, por formar parte de la red nacional de carreteras, mientras en el segundo son de titularidad autonómica o provincial.

Cuando se inauguró la autovía Ayamonte-Huelva, en el año 2000, Fomento ya sugirió a la Junta de Andalucía que le correspondía a ella la construcción de los enlaces de esta vía de alta capacidad con la antigua nacional que transcurre en paralelo, pero la Junta se negó alegando que ambas carreteras eran estatales. Fomento accedió finalmente a su construcción, pero ahora resta la conexión de dicha nacional con las poblaciones costeras de la zona, como Punta Umbría, Islantilla o Cartaya, muy pobladas en verano. La Junta ya ha aprobado la redacción de los proyectos y estudios informativos, por lo que la conexión directa a las localidades costeras será una realidad en meses. Esa falta de coordinación entre las distintas administraciones respecto a los ritmos de algunas obras es lo que propicia que no pocos proyectos se retrasen en varios puntos de la geografía nacional, admiten desde Fomento. Por su parte, la Junta ha acordado devolver al departamento de Cascos 48 millones de euros procedentes del convenio firmado para construir la autovía Jerez-Los Barrios y hacerse cargo en exclusiva del desdoble de la A-381 (mucho más avanzada) y que Fomento haga lo propio con la N-340, cuyas obras no ha iniciado.