Wall Street sufre la cuarta pérdida consecutiva
Cuarta sesión consecutiva de retrocesos en los mercados estadounidenses. El Dow Jones se dejó un 1,68%, y el S&P 500, un 1,57%, atenazados, una vez más, por el aumento de la tensión bélica entre Estados Unidos e Irak, después de que el presidente George Bush afirmara que el régimen de Sadam no ha dado muestras de desarme y que se está agotando el tiempo.
El Nasdaq no escapó a las pérdidas. Un 0,87% se dejó el mercado tecnológico, después de permanecer en positivo gran parte de la jornada.
Los índices continúan, así, moviéndose en un estrecho margen. Credit Suisse First Boston muestra que el S&P ha oscilado entre los 870 y 940 puntos desde octubre. También ajustada es la horquilla para los bonos a 10 años, cuya rentabilidad se ha movido entre el 3,8% y 4,25%. 'El rango continuará, a menos que nos encontremos cerca de una solución al problema de Irak', auguran los expertos.
La avalancha de resultados en línea o mejores de lo esperado no logró impulsar los mercados. Una muestra, dicen los expertos, de la desconfianza reinante. Citigroup dijo que los beneficios cayeron un 37% en el cuarto trimestre de 2002, si bien mejoró las previsiones para este ejercicio. Bajó el 2,07%.
Ford publicó cifras mejores de lo previsto y afirmó que las cuentas de este año estarán por encima de las estimaciones. Aun así, cayó el 0,49%.
3M, Johnson & Johnson y Charles Schwab presentaron asimismo balance. El conglomerado cayó un 0,69%, la farmacéutica perdió un 1,31%, y el intermediario por Internet, el 10,5%.
La sombra de los escándalos contables volvió a planear, después de que la SEC afirmara que ha aumentado la investigación sobre Electronic Data Systems e Interpublic.
Ni siquiera la fortaleza de los datos económicos evitó el desánimo. La construcción de viviendas alcanzó máximo de 12 años en diciembre, pese a la debilidad económica.
El Euro Stoxx cedió el 1,1%, hasta el nivel más bajo de los tres últimos meses, a pesar de que las cifras económicas y resultados empresariales superaron las expectativas.
Entre los indicadores, la encuesta del instituto Zew alemán sobre expectativas económicas subió en enero por primera vez en siete meses. Además del buen dato alemán, en Francia se publicó una mejora sustancial del consumo. El gasto de los consumidores en diciembre creció un 1,6%, la mayor alza en tres años. La nota negativa procedió de Italia, donde la confianza de los consumidores bajó más de lo previsto.
Los datos, aunque positivos, 'no cambian nuestra perspectiva de que la mejoría no es inminente', explican los expertos de BNP Paribas.
Los resultados también estuvieron en línea de las estimaciones. Credit Suisse dijo que una provisión excepcional provocará una pérdida de unos 2.500 millones en 2002, pero mejoró la perspectiva para este ejercicio. Subió un 2,54%. La aseguradora Aviva, por su parte, dijo que las condiciones del mercado siguen siendo difíciles. Cayó el 4,22%.
En otros sectores, Infineon bajó el 4,8%, la segunda caída consecutiva. Alcatel, por contra, sumó el 4,55%, tras una mejora de recomendación.
Una de las mayores caídas correspondió al fabricante de aluminio Pechiney, el 5,99%, después de que su rival canadiense Alcan presentara cuentas peores de lo previsto.
Las Bolsas de la región volvieron a perder ayer afectadas, de nuevo, por las tensiones internacionales. El Merval de Argentina se llevó la peor parte, con una caída del 2,26%. En Brasil, Bovespa cedía un 1,83%, mientras el real se depreció hasta las 3,49 unidades por dólar, quinta caída consecutiva de la moneda.
El Nikkei dejó atrás las pérdidas y se anotó un alza del 1,75%. Mizuho Holdings, el principal banco del país, subió más del 4% a pesar de reconocer que espera registrar pérdidas de 16.500 millones de dólares en el ejercicio. Subieron también empresas exportadoras, como Toyota o la tecnológica Advantest.