El BBVA informa a Garzón de una antigua cuenta secreta del Vizcaya
El BBVA notificó el pasado mes de diciembre al juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, la existencia de una antigua cuenta secreta abierta por el Banco Vizcaya en 1956 y cancelada en 1998, en la que no existió ningún movimiento significativo. Asimismo, el banco ha aportado exhaustiva documentación sobre las operaciones relativas a México y Colombia, sin que haya indicios de blanqueo de capitales.
Entre la documentación aportada, se encuentra un informe sobre la oferta pública de intercambio de acciones (OPI) de BBV por acciones de Banco Ganadero, presentada en la Superintendencia de Valores de Bogotá en 1998, así como sobre los préstamos otorgados por el Grupo BBV durante los años 1994 a 1999 a Marco Aurelio Royo Anaya, presidente de Banco Ganadero, y a José Madariaga Lomelín, ex presidente de BBV Probursa. En relación con la OPI se cree, según una investigación interna de la entidad, que se realizó cumpliendo con todos los requisitos legales tanto de Colombia como de España, con total transparencia, y que, a través de ella, BBV incrementó su participación en Banco Ganadero del 40 al 55%.
De la documentación aportada por BBVA no se desprenden indicios de supuesto delito de blanqueo de capitales procedentes de actividades ilícitas.
Cuenta en Credit Suisse Zurich
El BBVA ha aportado además documentación sobre una cuenta del Banco Bilbao Vizcaya en Credit Suisse Zurich, abierta en julio de 1956 a nombre de Banco de Vizcaya, con 518.254 dólares transferidos desde la sucursal de Tánger, que fue cancelada en 1998 y no estuvo consolidada en los estados financieros del BBV.
Los ingresos que tuvo la cuenta desde su origen hasta su cancelación se derivan únicamente de los rendimientos resultantes de depositar su saldo en plazos sucesivamente renovados. La cuenta tuvo como única disposición la transferencia en julio de 1998 de su saldo final, 811.546,69 dólares, a BBV Privanza Bank Jersey para su abono a BBV, momento en el cual fue cancelada. El BBV utilizó posteriormente dicha cantidad para un pago a José Madariaga Lomelin, derivado de una relación de prestación de servicios, que permitió a la entidad conocer la existencia de la cuenta.