EE UU y Corea del Norte buscan una solución diplomática a la crisis
La diplomacia parece imponerse en la crisis nuclear originada por Corea del Norte. Tras materializarse el pasado sábado su abandono del Tratado de No Proliferación (TNP) nuclear, el Gobierno de Pyongyang está dispuesto a dar marcha atrás, a cambio de lograr algunas concesiones de EE UU.
El régimen de Kim Jong Il reiteró ayer que la decisión de reactivar el programa nuclear responde a necesidades de generación energética y no al deseo de fabricar armas atómicas. Pyongyang se mostró dispuesto a revisar su retirada del TNP si EE UU acepta un 'diálogo justo'. El embajador norcoreano en Rusia, Pak Ui Chum, declaró que la clave es que la Casa Blanca 'deje de usar a la Agencia Internacional de la Energía Atómica AIEA como instrumento de presión'. La agencia descartó ayer una reunión de emergencia, a la espera de los resultados de las negociaciones.
El subsecretario de Estado de EE UU, James Kelly, se mostró ayer dispuesto al diálogo. Kelly está en Seúl en busca de una solución dialogada a la crisis nuclear.