Telefónica recupera el dividendo con el reparto de 25 céntimos por acción
El presidente de Telefónica, César Alierta, cumplirá el próximo año su compromiso de retornar a la retribución directa de los accionistas de la compañía. Conforme a esta promesa, el consejo de administración de Telefónica ha decidido que propondrá a la junta de accionistas el reparto de un dividendo bruto de 0,25 euros por acción, con cargo a reservas de libre disposición.
La operadora había tomado la decisión de suspender el pago de dividendos a finales de 1998. En aquel momento, el presidente de la compañía era Juan Villalonga. Como argumento para justificar esa controvertida decisión esgrimió que 'los accionistas reciben su remuneración a través de la revalorización de las acciones'. Además, prometió que realizaría una política de ampliaciones de capital gratuitas.
A comienzos de 1999, el valor de la acción de la compañía se situaba en 11,22 euros y desde entonces hasta la fecha se ha depreciado un 22,49%. La estrategia emprendida por Villalonga se basó en una política agresiva de compras, básicamente con títulos, y coincidió con el momento más brillante de los mercados de valores, especialmente para los valores ligados a las telecomunicaciones.
Junto a la aprobación de la propuesta del dividendo, el consejo de administración de Telefónica adoptó 'los acuerdos pertinentes' para la puesta en marcha de dos nuevas ampliaciones de capital gratis para el accionista, que fueron aprobadas por la última junta general, celebrada el pasado 12 de abril.
El objetivo final de ambas medidas, según la información ofrecida ayer por la empresa, es 'hacer partícipe al accionista de las mejoras de eficiencia y aumento de flujos de caja generados en los últimos años'.
Ambas ampliaciones de capital se realizarán con cargo a reservas de libre disposición, en cuantía equivalente cada una de ellas, al 2% del capital social de la operadora.
Ampliaciones
La primera ampliación de capital se realizará a lo largo del mes de enero, mediante la emisión de 97.213.225 nuevas acciones ordinarias, que se distribuirán gratuitamente a los accionistas a razón de una nueva acción por cada 50 antiguas, según explicó la compañía.
La segunda ampliación supondrá la emisión de 99.157.490 títulos, otro 2% del capital tras la incorporación de los títulos de la primera ampliación, y se llevará a cabo entre febrero y marzo de 2003 y en todo caso con anterioridad a la junta general de accionistas.
La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), tras darse a conocer la decisión de Telefónica de proponer un dividendo de 0,25 euros por acción, decidió suspender la cotización de su valor, lo que creó un cierto desconcierto. La suspensión fue levantada 15 minutos más tarde.
En el momento de la suspensión, Telefónica caía un 1,3% y tras la reanudación de la cotización recuperó medio punto. Más tarde, las pérdidas generalizadas de la sesión volvieron a arrastrar su valor, que terminó cediendo un 1,8%, para situarse en 8,70 euros.
Las competidoras europeas de Telefónica vivieron una sesión sensiblemente peor que la de la operadora española. France Télécom cedió el 3,05%, BT perdió un 3% y Deutsche Telecom, el 2,5%. El último año que Telefónica remuneró a sus accionistas fue en 1998.
El dividendo en aquella ocasión fue de 0,20 euros por acción. Fuentes de la operadora han puesto de manifiesto que el pago que se propondrá a la junta de accionistas será un 25% superior al de 1998 y exigirá un desembolso total de unos 1.250 millones.
Explicaron que este incremento es compatible con los resultados negativos que la empresa dará a final de año, 'dada la positiva evolución del flujo de caja que ha experimentado la compañía durante los nueve primeros meses del ejercicio'.
El consejo de administración de Telefónica decidió aceptar la baja solicitada como consejero de Luiz Fernando Furlán como consecuencia de su designación para el cargo de ministro de Desarrollo, Industria y Comercio en el nuevo Gobierno de Brasil, que encabeza Luiz Inácio Lula da Silva.
Furlán fue nombrado consejero de Telefónica el 20 de diciembre de 2000 y su designación como consejero independiente fue uno de los primeros cambios realizados en el consejo de administración a propuesta del presidente, César Alierta. Luiz Fernando Furlán sustituyó en el cargo a Bert Roberts, presidente de MCI.
Repsol YPF mantiene abierto el pago del complementario
El consejo de administración de Repsol YPF aprobó ayer el pago de un dividendo a cuenta sobre los beneficios del año 2002 de 0,15 euros por título. Este dividendo supone un recorte del 28,6% sobre el total pagado el año anterior. La compañía mantiene abierta la posibilidad de pagar un dividendo complementario. El que se iba a pagar a cargo del pasado ejercicio fue eliminado por la crisis argentina. En la decisión de ayer ha primado, según fuentes de la petrolera, la prudencia, pese a que los datos actuales muestran una cierta recuperación de la economía de Argentina. En recientes declaraciones, el presidente del grupo, Alfonso Cortina, descartaba nuevas provisiones por los activos en ese país suramericano y señalaba que los resultados finales estarían en línea con los del trimestre precedente. 'La situación económica en Argentina se está estabilizando', señalaba en otras manifestaciones también recientes. Y añadía que, cuando la situación en ese país se clarifique, Repsol YPF podrá anunciar modificaciones en su plan estratégico.La determinación de cancelar el pago del dividendo complementario sobre el pasado ejercicio se tomó en marzo de este año, cuando la debacle argentina atravesaba uno de sus peores momentos. Repsol se enfrentó a los efectos de la fuerte devaluación del peso y al impacto de la crisis en el consumo en esa nación. Desde entonces, la petrolera ha conseguido una fuerte reducción de su endeudamiento financiero, que ha bajado más del 47% y ha adecuado sus inversiones. También el consejo de Fenosa acordó ayer repartir un dividendo a cuenta de 0,24 euros por título, lo que supone un incremento del 5,82% respecto al pagado el año precedente, sin incluir el efecto de las acciones propias. La eléctrica ha suscrito esta semana un préstamo por 1.750 millones para refinanciar su deuda.