El escenario geopolítico da la espalda a los mercados
Los índices de Europa y Estados Unidos caen en bloque ante el creciente temor a una guerra en Irak.
Un conocido analista de un banco estadounidense señalaba hace unos días que las Bolsas están caras o baratas dependiendo del ánimo inversor. Sin restarle importancia a los ratios financieros, este experto destacaba que sólo un cambio en esta variable tan subjetiva daría por finalizado el mercado bajista.
Por el momento, nada parece indicar que las cosas no puedan ir a peor en los mercados, algo que no pasa inadvertido entre los inversores. La posibilidad de una guerra en Irak sigue pesando como una losa, así lo demuestra el precio del crudo (alrededor de los 29 dólares); del oro, el más alto en cinco años, y del dólar, que se cambia al nivel más bajo frente al euro desde finales de 1999.
Pese a todo lo anterior, la caída del Dow (-XX%) fue relativamente suave teniendo en cuenta el alza del 2,3% del lunes. Más leve todavía fue el descenso del Nasdaq (-XX%).
El repunte en la construcción de viviendas nuevas y el alza por debajo de lo esperado del IPC en noviembre fueron insuficientes para contrarrestar la peor noticia de la sesión, el profit warning de McDonald's. La mayor cadena de hamburguesas del mundo anunció que presentará pérdidas en el cuarto trimestre, la primera vez en su historia que entra en números rojos en un trimestre. Cayó el xx%
Por otro lado, la cadena de grandes almacenes Target cayó un xx% al reconocer que espera vender menos de lo previsto en diciembre. Otros valores del sector minorista, como Circuit City Stores (-XX%) o Best Buy (-XX%), retrocedieron por las malas perspectivas de ventas en la campaña navideña.
Una nueva amenaza se cierne sobre los blue chips del Viejo Continente, la fortaleza del euro. La divisa europea alcanzó ayer su nivel más alto frente al dólar de los tres últimos años, una muy mala noticia para las compañías con un claro perfil exportador. Las plazas peores paradas fueron Francfort (-2,04%) y Londres (-1,89%), esta última afectada por los retrocesos del sector minorista, muy sobrevalorado, según algunos analistas.
A excepción del grupo de servicios financieros, que subió un leve 0,23%, los 18 sectores restantes del Stoxx 600 cerraron con pérdidas. No se libraron de las caídas ni las petroleras (-0,69%), donde pudo verse algo de toma de beneficios tras las alzas de las últimas jornadas.
Fue en las Bolsas alemana y francesa en las que pudo verse con más claridad los efectos del alza del euro frente al dólar. Un ejemplo fueron los descensos de Siemens (-2,1%) y DaimlerChrysler (-2,73%) en Francfort, y de Michelin (-3,49%), Pinault (-5,37%) y ST Microelectronics (-3,44%) en París, todas ellas notables exportadoras. No obstante, la atención en la plaza alemana la concentró la eléctrica Eon, que cayó un 4,49% tras conocerse que un tribunal ha bloqueado la compra de Ruhrgas.
El otro punto de atención fueron las notables caídas de las empresas minoristas en el Reino Unido. Los analistas de Credit Suisse First Boston alertaron de las dificultades del sector para cumplir con las expectativas anuales. Así, la cadena de tiendas de juegos electrónicos Game Group se desplomó un 57,24% tras anunciar que ganará menos de lo esperado y contagió a los gigantes del sector, como Woolworth (-11,27%) y Dixons (-5,81%).
Los inversores internacionales celebran que el presidente electo de Brasil, Lula da Silva, esté armando un Gobierno de base política amplia. La posibilidad de que Henrique Meirelles, un ex ejecutivo de FleetBoston, dirija el Banco Central fue acogida con un alza del xx% del Bovespa.
El Nikkei cerró ayer con un alza del 0,71%, la primera en 10 sesiones. El volumen fue escaso, aunque no impidió las alzas de la banca. Algunos expertos creen que el Gobierno presionará menos de lo esperado a los bancos para que saneen sus cuentas. Mizuho, el mayor banco del mundo por volumen de activos, subió el 11,32%.