54 años de cárcel para los etarras que mataron a un guardia en Barcelona
La Audiencia Nacional condenó ayer a 54 años de prisión a los miembros del comando Barcelona de ETA Fernando García Jodra y José Ignacio Cruchaga por el asesinato, el 20 de diciembre de 2000 en la capital catalana, del guardia urbano Juan Miguel Gervilla.
La sentencia, dictada por la Sección Primera de la Sala de lo Penal de este tribunal, declara probado que Gervilla fue abatido por los disparos de los dos terroristas después de mantener con ellos un forcejeo junto al vehículo que ocupaban, que se les había averiado en la avenida Diagonal de Barcelona y con el que pretendían atentar contra el periodista Luis del Olmo.
El tribunal considera probado que García Jodra y Crutxaga se establecieron en Barcelona en marzo de 2000. En julio se incorporó al comando Lierni Armendáriz, quien trajo desde Francia material explosivo, detonadores, placas de matrícula en blanco y otros elementos para confeccionar artefactos explosivos. Hasta entonces, los terroristas sólo habían contado con dos pistolas.