El crédito bancario para compra de valores cae un 24%
La crisis de los mercados de valores que ha alejado a muchos inversores de la Bolsa se ha notado también en el negocio del crédito de los bancos. Hace dos años, en plena euforia bursátil, los españoles pedían dinero a los bancos para invertir en acciones, sobre todo en valores tecnológicos y comunicaciones. En los primeros meses de 2000 se disparó la compra de títulos mediante préstamos, tanto a través del sistema de crédito de que dispone la Bolsa española como a través de los préstamos de los bancos. Las entidades aprovecharon el momento e incluso sacaron al mercado productos específicos para la compra de acciones o fondos de inversión, con tipos de interés ventajosos en comparación con los créditos al consumo.
Pero la aversión al riesgo tras el descalabro de los mercados ha cambiado el panorama.
Aunque el peso de los préstamos para compra de valores sobre la cartera total de los bancos es mínimo, llama la atención la fuerte caída experimentada en el último año. Así, el saldo de este tipo de crédito hasta octubre se situó en 462,61 millones de euros, un 24% menos que el año pasado, según datos recogidos en los balances y estadísticas que presenta la Asociación Española de Banca. De hecho, es el único epígrafe entre el conjunto de préstamos destinados a financiar gastos en los hogares que desciende.
En general, los créditos para financiar a particulares siguen ganando peso en detrimento de los destinados a actividades productivas. Aunque las empresas son todavía el destino preferido de la financiación bancaria, al absorber el 60,53% del total, el porcentaje de préstamos para los hogares no ha dejado de aumentar en los últimos años y representan ya el 38,32% del total, ocho puntos más que hace cinco años.
Este aumento se ha producido, sobre todo, por el fuerte tirón de los créditos destinados a adquisición de vivienda propia, el 27,5% del total, con un aumento del 14% de octubre a octubre, tasa moderada en comparación con los meses anteriores. También se desacelera la financiación para compra de bienes duraderos.