Acuerdo provisional para los mensajes con imagen
Telefónica Móviles, Vodafone y Amena han llegado a un punto de compromiso para hacer posible que los mensajes multimedia (que incorporan imágenes y sonidos polifónicos) que se generen en cualquiera de las redes de estos operadores puedan recibirse en los nuevos teléfonos móviles de los clientes de sus competidores.
El pacto tendrá en principio un carácter muy provisional, ya que las tres operadoras aún no han logrado un acuerdo económico sobre el reparto de los ingresos que se generen en la emisión de un mensaje en el que intervengan dos redes.
En esta situación, el compromiso alcanzado pretende que los mensajes multimedia puedan ser intercambiables a partir de la semana que viene, aun en el caso de que no se haya rubricado un acuerdo de reparto económico definitivo, según fuentes cercanas a las negociaciones.
El servicio de nueva mensajería multimedia a través del móvil fue lanzado en España (junto a una nueva generación de aparatos capaces de hacer y transmitir fotos) el pasado verano por Amena. Posteriormente se incorporaron al servicio Telefónica Móviles y Vodafone.
El atractivo de estas nuevas facilidades celulares se ha visto ensombrecido hasta la fecha por el hecho de que las operadoras no habían alcanzado el acuerdo que permitiera intercambiar mensajes entre teléfonos de clientes de distintas compañías. Las empresas hicieron público el compromiso de llegar a un pacto antes de la Navidad, fecha en la que se produce una de las campañas de venta de móviles más importantes del año. Además, durante el último semestre las campañas publicitarias para poner en el mercado los nuevos terminales y servicios celulares con imágenes han sido intensas y han movilizado una inversión total que los expertos estiman en unos 30 millones de euros.
Negociaciones
El proceso negociador entre operadoras dura ya más de dos meses y ha estado planteado en tres niveles superpuestos. El primero busca poner en comunicación las plataformas tecnológicas de Telefónica Móviles (que ha sido suministrada por Nokia), de Vodafone y de Amena (ambas suministradas por Ericsson). En este punto parece que la compatibilidad es completa. El segundo nivel de negociación afecta al intercambio de información sobre los protocolos de cada uno de los servicios para hacer posible la interoperabilidad.
En este campo los acuerdos son más complejos cada día, pero las fuentes citadas afirman que las pruebas también se han completado con éxito.
En el tercer nivel se discute el reparto de los ingresos que generan los servicios. Todo indica que ha sido en este punto de la negociación donde se han planteado los principales desencuentros.
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