Facilidades para engordar el plan

Pocos pero significativos son los cambios fiscales en planes de pensiones para este año. No hay que olvidar que restan 15 días para reducir la factura con Hacienda. La primera modificación, recogida en la Ley de Acompañamiento para 2001, suprime el límite del 25% de rentas de trabajo, que para los mayores de 52 años alcanzaba el 40%. Este límite suponía que los contribuyentes de hasta 51 años, con un rendimiento neto inferior a 28.848 euros, nunca podían llegar al límite absoluto de aportación de 7.212,14 euros.

También se duplica el ritmo de incremento de aportaciones para los contribuyentes que cuenten con más de 52 años. En vez de aumentarse en 601 euros anuales, crece en 1.200 euros por cada año que se sobrepase de 52 años. Por ejemplo, con 65 años la aportación máxima es de 22.838 euros. De este modo, el ahorro fiscal que puede obtener un partícipe con un tipo marginal del 48% alcanza los 10.962 euros, cuando el año pasado la rebaja mayor se situaba en 7.212 euros.

Para rentistas

Otra de las novedades es la posibilidad de abrir un plan de pensiones para personas que obtengan rentas de inversiones financieras, comentan en el despacho Cuatrecasas. Este año se pueden realizar aportaciones a un fondo para los contribuyentes que no perciben rentas del trabajo o actividades económicas, sino que viven de sus inversiones (ganancias de acciones, fondos de inversión o depósitos, rentas de alquileres o por los rendimientos de una herencia).

Conviene aclarar, asegura Luis Miguel Bravo de Cuatrecasas, que las aportaciones no pueden genera base liquidable negativa individual, incluso cuando se declara de forma conjunta. Esto supone que si se realiza una aportación a un plan por 12.250 euros y sólo se tienen rentas por 10.000 euros, 2.500 euros no se los podrá desgravar este año. Esos 2.500 euros los podrá desgravar en las liquidaciones futuras a lo largo de los próximos cinco años.

Se mantiene la posibilidad de realizar aportaciones de hasta 1.803 euros al plan de pensiones del cónyuge, que obtenga rentas inferiores a 7.212 euros, y deducirse por ello.

Este año se da un pequeño empujón a los planes de pensiones del sistema de empleo. De tal manera que funciona independientemente del plan del sistema individual. La empresa podrá realizar aportaciones por importe de hasta 7.212 euros si es menor de 52 años y el contribuyente podrá ingresar en su plan de pensiones individual otros 7.212 euros si es menor de 52 años (o 22.838 euros si cuenta con 65 años). Hablando en plata, se duplican las aportaciones y las desgravaciones.

Como botón de muestra: la mayor aportación que se puede realizar, entre la empresa y el trabajador, a los 65 años es de 45.676 euros, lo que permite aligerar la factura con Hacienda (de un contribuyente con un tipo marginal del 48%) en 21.924 euros. El próximo año el tipo máximo será del 45%.

El atractivo para la empresa reside en una deducción adicional del 10% por las aportaciones realizadas para los trabajadores con salario bruto no superior a los 27.045 euros. Sin olvidar que las compañías pueden deducirse como gasto todas la aportaciones a los planes de sus empleados.

Menos tiempo de espera en los traspasos

Desde 1988, si un partícipe de un fondo no está conforme con su plan puede traspasar el dinero a otra entidad. Hoy ejerce este derecho menos del 10% de los suscriptores. Antes, el traspaso del dinero no se hacía efectivo hasta los tres meses y desde el 1999 la normativa lo fija en 15 días, plazo que normalmente se agota y que aprovechan las gestoras para efectuar una contraoferta.Para agilizar el proceso, Inverco trabaja para canalizar los traspasos a través del servicio nacional de compensación electrónica del Banco de España. La fecha límite interna que se ha marcado la patronal es el 30 de junio de 2003, según confirma Enrique Ortiz, director de desarrollo de negocios de BBVA Gestión y miembro del comité técnico de traspasos. La mayor ventaja de esta adhesión es la seguridad de las transacciones. Se terminará con el papel y preparará el camino a Hacienda que podría reducir el plazo a siete días.