El IEE plantea que las empresas no tributen por reinvertir plusvalías
El Instituto de Estudios Económicos (IEE) hizo público ayer sus propuestas para una nueva reforma del impuesto de sociedades.
Su director, Juan Iranzo, recalcó que la ley actual, vigente desde 1996, se ha quedado anticuada en algunos aspectos, dados los últimos cambios introducidos por gran parte de los países miembros de la Unión Europea. Además, se hace necesario un texto refundido en donde se incorporen las novedades introducidas por el Ejecutivo español en las últimas leyes de Presupuestos y las reformas del IRPF (la actual y la que entrará en vigor en 2003).
Entre las recomendaciones principales, el IEE propone la exención total de tributación para las plusvalías reinvertidas. Actualmente las plusvalías que reinviertan las empresas tributan al 35%, pero gozan de una exención parcial de 17 puntos porcentuales, por lo que el tipo efectivo final se sitúa en el 18%.
A partir de 2003, el gravamen por reinversión de plusvalías se reducirá tres puntos, del 18% al 15%, según una enmienda introducida por el PP en el proyecto de ley de reforma del IRPF, aún en trámite parlamentario. Ahora, el Instituto de Estudios Económicos quiere ir más lejos y desea que las empresas no tengan que pagar un solo euro por las plusvalías que afloren y reinviertan. Esos fondos serían utilizados por las sociedades para ganar competitividad. De la misma forma, el IEE propone que se incrementen los actuales incentivos por inversión en I+D+i (investigación, desarrollo e innovación), se aumente la bonificación por contribuciones a planes de pensiones colectivos para los trabajadores y se permita a las promotoras de viviendas en alquiler gozar de un régimen de baja tributación para incentivar la construcción de viviendas para arrendamiento.
El tipo general, al 32%
La reforma se completaría con la reducción del tipo general del impuesto (está en el 35%) hasta el 33% o 32%.
El director general de Tributos (Ministerio de Hacienda), Miguel Ángel Sánchez, que estuvo presente en la presentación de las propuestas, elogió el esfuerzo del instituto en abrir vías de debate 'de cara al futuro'. Sánchez aceptó la reducción del tipo general como una reflexión, encuadrada en un esquema general de recortes fiscales graduales, pero advirtió que el tipo de gravamen que soporta gran parte de las empresas (pymes) se encuentra ya por debajo (el 30%). En su opinión, Hacienda está más interesada ahora en otros asuntos como la reducción de la doble imposición y la consolidación fiscal entre filiales dentro del territorio de la UE.