Cinco empresas crean un consorcio para reducir los riesgos con Cuba
Las dificultades para el cobro de los suministros desde el exterior no son raras en Cuba. Hasta ahora los exportadores vascos tenían que avalar el importe de los contratos, con lo que su riesgo en este mercado, ya de por sí complicado, era doble. Por eso, desde el Cluster (asociación) de Energía del País Vasco se ha impulsado una nueva fórmula que facilite las exportaciones a la isla del Caribe. Así nace el consorcio Gececuba, que avalará las exportaciones de las empresas vascas de energía que se apunten a este consorcio impulsado por los cinco promotores citados. El objetivo de Gececuba es el de conseguir avalar cada año operaciones por un importe de 40 millones de euros.
El sector vasco de la energía es uno de los proveedores más activos del país que gobierna Fidel Castro, puesto que en el horizonte de los próximos cuatro años tiene firmados protocolos de contratación con ministerios y empresas de Cuba por un importe global de 150 millones de euros.
Juan José Alonso, director gerente del Cluster de la Energía, explicó ayer en Derio (Vizcaya) a casi medio centenar de empresarios vascos la fórmula de cobro de sus pedidos en Cuba a través de Gececuba. En primer lugar, Mexim, que es el avalista, recibirá los créditos de tres entidades financieras con las que ya ha negociado las condiciones de los préstamos. Estas entidades son el Banco Exterior de Comercio (BEC), el Banco Financiero Internacional (BFI) y el Banco Internacional de Comercio (Bicsa). Este trío ha conseguido evitar los impagados en más de una década de relaciones comerciales con Cuba gracias a su profundo conocimiento de los niveles de tesorería del entramado de ministerios y Administraciones, únicos clientes que se encuentra el empresario extranjero cuando se acerca a la isla.
Garantías
En el momento de la exportación, Mexim entrega al proveedor vasco integrado en Gececuba unas letras avaladas por los promotores de la sociedad de garantía recíproca, así como una cesión de crédito, en la cuantía necesaria hasta cubrir el valor total del pedido.
Además, estas operaciones están aseguradas al 70% por Esicuba, la aseguradora del Gobierno de Cuba. Por su lado, Esicuba se reasegura el 20% con Swiss Re, la cuarta compañía de seguros del mundo. Si alguno de los exportadores vascos sufre impagos, Gececuba paralizaría todos los proyectos en curso en el año en el que surgiera el problema.
Gececuba nace con condiciones para las empresas que quieran integrarse a su estructura, según especificó ayer Juan José Alonso. El grupo se constituye exclusivamente para las compañías integradas en el Cluster de Energía. Los asociados deberán pagar una cuota mínima anual de 310 euros, además de una comisión del 0,2% de los ingresos efectivos con cada vencimiento de pago.
Para pagar sus importaciones, Cuba tiene escaso acceso al mercado financiero a largo plazo (más de tres años). Las ofertas que recibe son de créditos a corto plazo (un máximo de seis meses). Por eso, los promotores de Mexim-Gececuba consideran que hay posibilidades de negocio en el medio plazo (dos años), entendiendo que Cuba es un mercado donde prima la oferta financiera en el pedido.