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Crisis

Jumberca se declara en quiebra y negocia la venta de sus patentes

La empresa catalana de maquinaria textil Jumberca se ha declarado en quiebra voluntaria, según un comunicado remitido ayer a la Comisión Nacional de Mercado de Valores (CNMV). El pasivo presentado por Jumberca asciende a 56,16 millones de euros, frente a un activo de 34,19 millones de euros. La compañía catalana, con sede en Badalona (Barcelona) y una plantilla de 202 trabajadores, se encontraba en suspensión de pagos desde 1998.

Los trabajadores de la compañía se encuentran negociando la venta de las patentes y la maquinaria de la empresa con un grupo inversor catalán liderado por el antiguo director general de Industria de la Generalitat y ex responsable de la Corporación catalana de radio y televisión (CCRTV), Miquel Puig.

La dirección de Jumberca cedió el material a la plantilla días antes de la presentación de quiebra en un juzgado de Badalona. Los inversores han ofrecido cerca de 500.000 euros por la totalidad de los activos, mientras que la plantilla los valora en un total de 12 millones de euros. La oferta del grupo también incluye la contratación de 121 de los trabajadores de Jumberca para la nueva empresa que planean poner en marcha los inversores. La nueva compañía podría ubicarse en la localidad barcelonesa de Santa Perpetua de la Mogoda. Miembros del comité de empresa de Jumberca, representantes del grupo inversor y la alcaldesa de Badalona, Maite Arqué, se reunirán mañana para continuar con las negociaciones.

En el momento de presentación de quiebra voluntaria, la empresa debía cerca de un millón de euros a los trabajadores en concepto de salarios impagados. A esta cantidad se suma la cifra de 1,5 millones con los que 140 trabajadores avalaron a la empresa para la obtención de un crédito.

Jumberca, fundada en 1948, sufrió en 1992 una suspensión de pagos anterior a la de 1998 y ha experimentado un total de nueve expedientes de regulación de empleo a lo largo de su historia.

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