Adelante, no lo destruyan

¿Tiene futuro la más exitosa alianza de la historia? En la reunión de Praga (...) que se celebra esta semana, los responsables de la OTAN se debaten entre la decisión de convertir en indispensable su unión en el siglo XXI o hacerla irrelevante. Dadas las situaciones que se han producido más allá del Atlántico en los últimos meses, en relación con el unilateralismo estadounidense y la debilidad europea, puede pensarse que todo podría decidirse en un día (...).

Pero sin micrófonos, y a pesar de las diferencias existentes sobre Irak (aquí hay tantas divisiones entre europeos como entre europeos y americanos), alarmada por la inestabilidad y por las armas de destrucción masiva, los miembros de la OTAN pueden llegar a una conclusión: que su seguridad común está mejor servida juntos que separados (...).

Todavía, con suerte, lo que surja de Praga no tendrá todo el signo de la OTAN tal y como la conocemos hasta ahora. Desde los tratados más recientes, de París a Roma, Washington o Nueva York puede venir una solución de cualquier sitio, puede surgir una reacción como la de Alemania, que ahora acepta que la OTAN sea capaz de alejarse (...) hasta donde los tratados lo permitan (...). De ahí, la insistencia americana en que ahora la OTAN busca tantos nuevos reclutas como sea posible: en Letonia, Lituania, Estonia, Eslovaquia, Eslovenia, Rumania y Bulgaria.

Algunos cuentan ya con mayor capacidad y más especialización que la vieja OTAN. Otros, apenas podrían lograr la correspondiente confianza (...). La visión de América es una OTAN como centro de una red de relaciones a través del Cáucaso, el Centro de Asia y más allá.