Viñedo frente al mar
Larga tradición la de la antigua denominación Valencia, hoy adaptada con ingenio y voluntad a las últimas tendencias vinícolas
El origen de la vid en la provincia de Valencia es antiquísimo, como demuestran las excavaciones arqueológicas. El vino siempre ha tenido una gran importancia social y económica. Fue la llegada del siglo XX y el boom inmobiliario sufrido en la costa los que limitaron y obligaron a replantearse los esquemas a los viticultores.
El viñedo valenciano hoy demuestra el tesón dedicado por sus bodegueros en el último tercio del siglo, con cuatro subzonas diferentes de alto valor enológico. La subzona Alto Turia comprende seis términos municipales de la comarca de los serranos. Es una zona montañosa con soleadas laderas al mediodía y el viñedo se cultiva en altitudes que van de los 700 a los 1.000 metros. Las variedades fundamentales de uva son merseguera y macabeo. La subzona Valentino es la más amplia y la que cuenta con mayor variedad de vinos debido a la diversidad de suelos y climas. Está situada en la parte central de la provincia. El viñedo se cultiva en altitudes que van desde los 250 hasta los 650 m., y las variedades de uva son macabeo, merseguera, malvasía, planta fina y pedro ximénez en blancas, y garnacha, tempranillo y tintorera en tintas.
La subzona Moscatel de Valencia se encuentra situada en la parte central de la provincia de Valencia, solapada con la subzona Valentino. Son tierras cálidas y soleadas con influencia del aire marino en las que vegeta perfectamente la variedad moscatel romano o de Alejandría, obteniéndose unos mostos naturalmente ricos en azúcar. Los métodos de elaboración están dirigidos a obtener mistelas, un vino con una alta graduación alcohólica y con un aroma particular, fluido y suave. También encontramos en esta comarca vinos secos e incluso espumosos dulces elaborados con esta variedad.
Por último, la subzona Clariano se encuentra situada al sur de la provincia, en la comarca del Valle de Albaida y parte de la comarca de La Costera. El terreno es abrupto y ondulado, con altitudes que van desde los 400 hasta los 650 m. Se cultivan macabeo, malvasía, tortosi, planta nova y verdil en blancas y garnacha, forcayat, monastrell, tempranillo y tintorera en tintas.
Con fuerte influencia mediterránea, el clima en el territorio de la DO Valencia se caracteriza, en líneas generales, por fuertes tormentas y aguaceros en verano y otoño. El régimen térmico oscila entre los 38º C en verano y 4º C bajo cero en invierno, situándose la media en unos 15º C. La pluviometría es de unos 500 mm. de media anual, con máximos en el periodo de octubre a diciembre. La insolación media es de unas 2.700 horas/año. El viñedo se localiza, fundamentalmente, en suelos pardos, escasos de humus, bien drenados y con caliza, lo cual favorece la calidad de los vinos.
El consejo regulador, creado en 1933 y consolidado con carácter oficial en 1957, garantiza la procedencia y la calidad de todos los vinos producidos bajo su denominación, más de 17.000 hectáreas repartidas entre más de 11.000 viticultores y tan sólo una centena de bodegas elaboradoras.
La DO elabora blancos, tintos, rosados, espumosos, de licor y rancios, pudiendo ser secos, semidulces o dulces. El color de los blancos característicos de Valencia oscila desde el blanco pálido de la subzona de Alto Turia al amarillo dorado de Cheste, en la subzona Valentino. En tintos, se encuentran desde jóvenes hasta grandes reservas, y en las mistelas, éstas se obtienen exclusivamente por adición al mosto natural de alcohol vínico en la proporción suficiente para impedir su fermentación. Los vinos rancios son vinos blancos y tintos de elevada graduación alcohólica sometidos a prácticas tradicionales de envejecimiento en barricas de roble o castaño.
Murviedro Tinto. Reserva 1996
Bodegas Murviedro fue fundada en 1927 como filial de Schenk, una de las principales compañías europeas del vino. En 1997 la firma traslada sus instalaciones a Requena (Valencia), donde construye una innovadora bodega. Produce vinos de calidad dentro de las DO Valencia, Utiel-Requena y Alicante. Murviedro Reserva 1996 presenta en cata un color rojo rubí de capa media; ribete granate con tonos teja. Aromas complejos de buena intensidad y calidad, con recuerdos de frutas compotadas sobre fondos de vainilla, cacao y tabaco. En boca es carnoso, con tanino noble, pulido y bien ligado con los fondos de fruta compotada, teniendo un paso de boca amable. Acompañará con gusto unas codornices rellenas de foie y trufa. Bodega: Murviedro. Crianza: 12 meses en barrica de roble. Variedades: tempranillo, monastrell y cabernet sauvignon. Cosecha: Muy buena. Temperatura de servicio: 18º C. Precio: Entre 8 y 9 euros.
Fusta Nova Moscatel Blanco. Cosecha 2001
La bodega se fundó en 1885 y mantiene un espíritu de constante crecimiento y renovación a través de la tradición familiar. El vino presenta un precioso color amarillo dorado pálido, cristalino y muy brillante. En nariz despliega fragantes notas de miel fresca, recuerdos de cascara de limón y abundantes ecos florales con un sutil fondo tostado. En boca resulta untuoso, sedoso y glicérico; taninos fundidos tapizan un paso de boca delicado y frutal, magnífico equilibrio acidez-azúcar, resultando a la vez fresco, goloso y maduro. Larga persistencia final. Maridará tanto con foie de oca como de pato, con quesos de pasta azul. A los postres será ideal con sorbetes de frutas cítricas: naranja, limón y pomelo. Bodega: Bodegas Vicente Gandía Pla. Crianza: 3 meses en barricas nuevas de roble francés de Allier. Variedades: Moscatel de Alejandría Cosecha: Muy buena. Temperatura: 10º C. Precio: 3,90 euros.
Reymos Espumoso de Moscatel. Vino Dulce
Cheste Agraria es una cooperativa fundada en 1918 famosa por elaborar excelentes monovarietales de moscatel. Para conseguir este espumoso la bodega ha partido de la variedad moscatel, elaborada con las más altas exigencias de calidad. Descubrimos así un vino color amarillo pajizo intenso con reflejos dorados, burbuja de tamaño medio con buen desprendimiento. Aromas de muy buena intensidad con claros recuerdos de moscatel sobre un fondo de flores blancas y notas amieladas. A la entrada de boca se manifiesta con un abundante, pero grato desprendimiento de carbónico dando paso a unas limpias sensaciones frutales, con un dulzor muy bien ligado en el conjunto. Maridará con postres como las peras al vino o el tocino de cielo.Bodega: Coop. Cheste Agraria. Crianza: No. Variedades: Moscatel. Temperatura de servicio: 6-7º C. Precio aprox. en bodega: 4 euros.