Las plusvalías afloradas elevan el 19% los ingresos por renta de sociedades
Los últimos cambios en la fiscalidad empresarial, incluidos en la pasada Ley de Acompañamiento a los Presupuestos Generales del Estado, están propiciando a las arcas públicas unos ingresos superiores a los previstos inicialmente. El nuevo régimen tributario, por el que se rebaja del 35% al 18% la tributación de las plusvalías latentes de años anteriores a 2002, a cambio de que se reinviertan, está provocando un aluvión de adhesiones por parte de las empresas.
La mayor afloración de plusvalías se traduce en una recaudación extra para Hacienda, derivada del impuesto de sociedades. Por este tributo se llevan recaudados de enero a septiembre 12.974 millones de euros, un 19% más que en el mismo periodo de 2001, según los datos facilitados ayer por la secretaria de Estado de Presupuestos, Elvira Rodríguez. Gran parte del alza en la recaudación se debe al cambio legislativo. Hacienda espera ingresar en todo el año cerca de 1.700 millones de euros, exclusivamente por esta razón.
La evolución del resto de tributos en los nueve primeros meses del año es satisfactoria para el Gobierno, teniendo en cuenta el actual escenario de desaceleración económica, en el que el crecimiento real del PIB se sitúa en torno al 2%.
Por IRPF se llevan recaudados 31.234 millones de euros, un 7,4% más en términos homogéneos. Por IVA, 27.821 millones, un 7,4% más, destacando, sobre todo el aumento del 11,2% del IVA por operaciones interiores. Por impuestos especiales, la recaudación acumulada registra un descenso del 3,8%, influida, sobre todo, por la tendencia al estancamiento de los ingresos por el impuesto de hidrocarburos.
Calculados los ingresos y gastos en términos de caja -cuando se computan en Tesorería-, el Estado acumuló de enero a septiembre un déficit de 6.607 millones de euros, equivalente al 1% del PIB, un 33% menos que en el mismo periodo de 2001.
En términos de Contabilidad Nacional -criterio de devengo utilizado por Eurostat-, el Estado registró un superávit de 1.313 millones de euros. Elvira Rodríguez confía en que al final del año se cumplan las previsiones iniciales, que pasan por que el Estado tenga un déficit del 0,5% del PIB, pero se alcance el equilibrio fiscal para el conjunto de las Administraciones públicas.
Una de las mayores preocupaciones es el aumento de los gastos sociales sobre lo presupuestado inicialmente. El desvío al alza de la inflación real sobre la estimada (2%) costará cerca de 1.000 millones de euros en pensiones, según Rodríguez.