El camino más corto para crear un negocio
El itinerario más breve para fundar una empresa está en una sola oficina. Allí, tres Administraciones colaboran para tramitar la creación de negocios con celeridad. Es la ventanilla única. Su versión virtual es, por el momento, sólo una promesa
Valladolid. Doce de la mañana. Sede de la primera ventanilla única que se inauguró en España. Seis funcionarios y dos empleados de las Cámaras de Comercio atienden a unas seis o siete personas interesadas en montar sus propios negocios. 'La persona que nos arrienda el local para la cafetería nos ha dicho que podíamos ahorrarnos ese pago', se queja una pareja sentada ante una mesa. Su interlocutora, una funcionaria del Ayuntamiento de Valladolid hace un gesto negativo con la cabeza. 'Lo siento mucho, pero es obligatorio pagar el IAE al ayuntamiento. Tienen ustedes que hacerlo, no hay otra forma'.
Es un diálogo habitual en cualquier ventanilla única. Allí, uno o dos funcionarios del Ministerio de Administraciones Públicas, uno del ayuntamiento correspondiente, otro de Hacienda, otro de la Seguridad Social, uno de la comunidad autónoma y dos coordinadores de las Cámaras trabajan codo con codo en la tramitación de nuevas empresas. Las 17 oficinas que el Gobierno y las Cámaras han creado en los tres últimos años han ayudado a fundar 5.000 negocios y 10.000 empleos. Más de 31.000 emprendedores se han acercado a la iniciativa. De ellos, sólo el 30% ha montado un negocio.
En cualquiera de esas ventanillas se puede tramitar una empresa en un plazo que oscila entre media hora, una quincena y el año, según el tipo de empresa. Tomamos tres ejemplos y seguimos los pasos para ponerlas en marcha.
El profesional autónomo. Llegamos a la ventanilla única para darnos de alta como asesor fiscal. La coordinadora que nos recibe nos explica que únicamente debemos realizar tres trámites: el pago del impuesto de actividades económicas (IAE) al ayuntamiento (una carga que desaparecerá en 2003), la declaración de inicio de actividad en Hacienda y el alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) de la Seguridad Social. Luego, distribuye el trabajo entre los distintos funcionarios.
Como las ventanillas únicas no tienen caja por razones de seguridad, nos indican que debemos pagar la liquidación del IAE en el banco y nos explican que hay uno al otro lado de la calle. Una vez hecho el pago, el funcionario del ayuntamiento pone dos sellos, el de Hacienda tramita la declaración de inicio de actividad y el la Seguridad Social hace lo propio con el alta en el RETA. Ha pasado apenas media hora y ya estamos en la calle. El papeleo está completo.
El pequeño negocio. La pequeña empresa es el cliente habitual y natural de la ventanilla única. La idea en este caso es abrir una pequeña tienda de delicatessen japonesas, a la que decidimos llamar Wanake. Una vez facilitada esta información a la coordinadora recibimos la primera objeción. El registro de nombres comerciales es un trámite que no está incluido en la ventanilla y que debemos realizar por nuestra cuenta en el Registro de la Propiedad Industrial.
El resto, nos explica, podemos despacharlo en sólo dos visitas, en las que tendremos que realizar cinco trámites.
En la primera visita, tras decidir adoptar la forma de empresario individual, nos indican que debemos rellenar la solicitud de la licencia de actividad inocua y de obras, ya que queremos realizar algunas modificaciones en el local. Para ello se nos exige una documentación concreta, además del pago de tasas en el banco. El plazo de concesión de la licencia por parte del ayuntamiento es de 15 días.
En la segunda visita solicitamos el alta en el IAE, una tarea que realiza el funcionario del Ayuntamiento de Valladolid. Tras ello llega el turno de la declaración de inicio de actividad. Rellenamos el impreso 037, nos llevamos una copia en la cartera y nos disponemos a solicitar el alta en el RETA. Como no vamos a tener empleados, nos ahorramos la declaración de apertura de centro de trabajo, aunque debemos cumplir con obligaciones como el sellado del libro de visitas o la adquisición de hojas de reclamaciones.
Ya sólo nos queda pedir la autorización de establecimientos comerciales, que en nuestro caso es de funcionamiento de industrias, establecimientos y actividades sanitarias. Se nos pide de nuevo una documentación específica y una vez aportada, el funcionario de la comunidad autónoma hace su trabajo.
La gran empresa. Pese a que no es el modelo de empresa habitual en las ventanillas únicas, la coordinadora escucha pacientemente nuestro proyecto -una empresa de reciclaje de aceites industriales- y nos sumerge en un mar de trámites que parece no tener fin.
Antes de nada, nos explica, debemos constituir la sociedad, un trámite por cuenta propia, ya que en la ventanilla no hay registrador ni notario. Tras ello tenemos que pedir en la ventanilla la certificación negativa de denominación, seguida de la solicitud del CIF provisional y la liquidación del impuesto de transmisiones patrimoniales.
A continuación hay que realizar, de nuevo por cuenta propia, la inscripción definitiva en el Registro Mercantil y obtener en la ventanilla el CIF definitivo. La ventanilla también nos tramitará la licencia de actividad clasificada, la licencia de obra, la inscripción en el Registro de Establecimientos Mercantiles, el permiso de gestión de residuos (para el que precisamos un seguro de responsabilidad civil y una fianza) y la autorización de recogedor aceites usados. Ya sólo nos queda el alta en el IAE, Hacienda y la Seguridad Social y la declaración de apertura de centro de trabajo. '¿Plazo mínimo?', preguntamos aterrados. 'Un año'.
Una página web que por ahora no permite hacer trámites
Pese a que fue presentada hace apenas dos semanas como una página web que permitiría iniciar los trámites para poner en marcha una empresa, la ventanilla única virtual es, al menos por el momento, sólo un embrión.La web, en la que se han recopilado más de 6.000 trámites administrativos, es una estupenda fuente de información para el emprendedor que tiene intención de iniciar la creación de su empresa, pero no ahorra ninguno de los trámites que deben realizarse en la ventanilla única física. Aunque el proyecto incluye conectar la web con las 17 ventanillas únicas presenciales que existen actualmente, sólo se ha realizado esa conexión con la de Valladolid en una primera fase piloto en la que se pretende analizar cómo funciona el sistema. 'La principal utilidad de la web en este momento es permitir que el futuro empresario realice su propio expediente de tramitación y acuda a la ventanilla presencial plenamente informado de los trámites y las opciones que tiene para crear la empresa', explican fuentes de las cámaras. En los ejemplos que hemos tomado de tres modelos de empresa acudimos previamente a la página para diseñar ese expediente. El apartado Diseñe su empresa nos formula una serie de preguntas para que decidamos aspectos como el lugar de establecimiento del negocio, la actividad, la forma societaria, la necesidad de solicitar licencia de actividad inocua o calificada o las tasas y permisos que debemos pagar y solicitar según la actividad. Una vez completo el cuestionario, que está acompañado del correspondiente servicio de ayuda, tan sólo nos queda ponerle una clave y enviarlo a la ventanilla única de Valladolid. Allí, el ordenador de la coordinadora permite recuperar la información e iniciar la tramitación de las empresas con parte del trabajo de información ya realizado.