El fundador de Imclone admite que utilizó información privilegiada
Sam Waksal, fundador de la empresa biotecnológica Imclone Systems, se ha declarado culpable de uso de información privilegiada, implicando en el caso a su hija. No ha acusado a su amiga Martha Stewart, cuyo imperio mediático y reputación han quedado dañados por su implicación en el caso Imclone.
Los investigadores han revelado que hubo ventas de acciones de Imclone por valor de 30 millones de dólares que pudieron estar basadas en información privilegiada. Waksal es el primer consejero delegado de una empresa que se ha declarado culpable durante la última oleada de escándalos empresariales en EE UU. Ha admitido que dijo a su hija Aliza que vendiese acciones de Imclone días antes de que la empresa anunciase que su fármaco contra el cáncer Erbitux había sido rechazado por las autoridades. Desde entonces, las acciones de Imclone han perdido el 88%. 'No di a Aliza la información, sólo le dije que vendiese', afirma Waksal.
Martha Stewart, propietaria de un importante grupo mediático y ex miembro del consejo de la Bolsa de Nueva York, está siendo investigada porque vendió 3.928 acciones de Erbitux el 27 de diciembre de 2001, el día anterior a conocerse la noticia. La misma jornada Alize Waksal vendió títulos por valor de 2,5 millones de euros. Según los investigadores, Waksal conoció que la autoridad farmacéutica rechazaría el medicamento el día 26, el 27 su familia vendió y el 28 anunció el fracaso de Erbitux.