El subsidio agrario, único escollo para el diálogo
El único punto de la reforma en el que el Gobierno insiste en no mover ficha es el del subsidio agrario para los trabajadores eventuales del campo.
Las enmiendas ofrecidas por el Ejecutivo a través del Grupo Parlamentario Popular en esta materia se centran en políticas activas y rentas de inserción para los nuevos trabajadores del sistema contributivo de Andalucía y Extremadura que ya no puedan acceder al anterior sistema de subsidio agrario.
El decretazo limitó el acceso a este sistema a los nuevos trabajadores de Andalucía y Extremadura, y a cambio creó un nuevo sistema contributivo de desempleo para todos los temporeros del campo de toda España.
No obstante, este nuevo sistema es incluso más duro en términos de cotización y de derechos que el régimen general.
Por ello, si los sindicatos consiguen alguna modificación más por parte del Ejecutivo, cabe pensar que ésta pueda llegar en algún momento de los trámites parlamentarios que restan (plenos del Congreso y del Senado) y que consista en la suavización de las reglas de cotización del nuevo régimen contributivo.
Sin embargo, los sindicatos reclaman que en Extremadura y Andalucía se mantenga el régimen actual también para los trabajadores que aún no han entrado en él y que el sistema contributivo sea optativo.
A todas luces, esto se presenta difícil, si no imposible, según lo manifestado ayer por el ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, quien precisó que en materia de subsidio agrario el Gobierno 'ha llegado todo lo lejos que podía llegar'.
En este contexto, el secretario general de CC OO en Andalucía, Julio Ruiz, anunció ayer mismo nuevas movilizaciones en esta comunidad autónoma 'hasta que el subsidio agrario sea repuesto y les sean devueltos sus derechos a los trabajadores del campo andaluz', informa Efe. Los secretarios generales de CC OO y UGT han advertido que mantendrán también viva esta reivindicación.