La Bolsa recupera el 4,58% tras el acuerdo entre Irak y Naciones Unidas

Los mercados hablaron más claro que nunca: no quieren guerra. El Dow Jones ganó un 4,6% el martes, la octava subida de su historia, tras el acuerdo entre la ONU e Irak para la vuelta de los inspectores. El contagio llegó a los mercados europeos ayer. El Ibex avanzó el 4,58%. Subía con fuerza por la mañana, redujo las ganancias al 2% cuando Wall Street abrió torcida y a poco del cierre volvió a remontar.

Hubo mucho de rebote técnico. No en vano, los mercados han cerrado el peor trimestre de los últimos años, llevan dos años y medio de crisis, y estaban en su nivel más bajo en más de un lustro. Así, valores como Santander, que ha perdido más del 30% en tres meses, remontaron a toda máquina.

Un 9,02% avanzó el banco, después de conocerse que ingresará 648 millones al vender parte de Banesto. Este dinero, además, no tributa y pasa directamente a la cuenta de fondos propios, al hacer caja vendiendo los derechos de suscripción. La entidad también agradeció la mejora de los mercados brasileños. BBVA subió menos, un 5,41%, mientras Telefónica ganaba el 6,71%.

Otros valores muy castigados últimamente, como Prisa o Endesa, también registraron subidas notables. La petrolera Repsol avanzó, por su parte, un 4,8%. La remontada del mercado se vio acompañada, esta vez, por una mejora del volumen de negociación. Se movieron 1.789 millones de euros, por encima de la media de los últimos tiempos.

La apertura de Wall Street, donde el Dow llegó a perder el 1,7%, tenía que ver con el pesimismo de los analistas. Merrill se volvió agorera con los semiconductores, Deutsche Bank con el software, y Morgan Stanley con Citigroup. Dow Chemical y BP rebajaron expectativas de beneficio. Eso pesó más que Dell, que elevó previsiones para el trimestre el martes a última hora. Según pasaron las horas, el mercado mejoró, y caía un 0,5% cuando cerró Europa.

Lo que cotizaba al alza, el acuerdo de la ONU e Irak, es la única noticia buena de verdad en mucho tiempo. Puede no haber guerra. Es decir, la sucesión de burbuja tecnológica, recesión, terrorismo, crisis de confianza y amagos de crisis bancaria puede no continuar con la guerra en una zona petrolera.

Si los mercados bajaban por miedo al conflicto, que se daba por hecho, es lógico que la Bolsa suba si no hay guerra. Bush, por su parte, no quiere que decaiga la tensión bélica, y pidió que la ONU pueda entrar a los palacios de Sadam. Pero el mercado no le hizo demasiado caso, pues la rendija a la solución pacífica se había abierto ya .

Menos incertidumbres

Este rebote ha reabierto el debate, abandonado durante un mes, sobre si los mercados están cerca del fondo. Se ha eliminado una incertidumbre que pesaba, y mucho. Aún tienen que mejorar tanto la economía como las cuentas, pero es cierto que una remontada de los mercados es más verosímil ahora que hace una semana.

Ya el lunes, Credit Suisse advertía que la aversión al riesgo de los inversores había caído a los niveles más bajos desde los momentos posteriores al crash de 1987. Aseguraba la firma suiza que cada vez que se llega a estos niveles, 'es cuestión de unas semanas que se marquen mínimos y la tendencia cambie'.

Donde no hay recuperación es en Japón. El Nikkei no aprovechó las ganancias de Estados Unidos y cerró con otro retroceso, que deja al índice de Tokio en su nivel más bajo de los últimos 20 años. Los problemas de la banca no dejan al Nikkei salir del pozo.

Los analistas, escépticos con el repunte

 

 

El acuerdo al que han llegado la ONU e Irak para una inspección limitada de sus arsenales ha relajado en gran medida a los mercados. Pero esto no significa que las incertidumbres hayan desaparecido. José Luis Martínez, economista de Citigroup, comentaba ayer que 'todo hace pensar que aún seguiremos preocupados por la posibilidad de guerra en Irak. En caso contrario, ¿por qué el petróleo se ha mantenido ante noticias favorables en niveles de 29 dólares el barril'?

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

La fuerte subida que experimentó Wall Street la víspera y Europa un día después obedece, según el experto de Citigroup, a posiciones cortas tras el principio de acuerdo entre la ONU y las autoridades de Irak.

 

 

 

 

 

 

 

En este sentido, Andrés Martínez, gestor de carteras, señala que, 'si se mantiene la expectativa de que la guerra puede demorarse, mucho mejor si no llega a producirse, el mercado podría experimentar un rebote importante, porque se trataría de recuperar lo que la tensión bélica ha contribuido a acelerar la caída de la Bolsa'.

 

 

 

 

 

 

 

Safei recordaba en su análisis diario que todavía siguen sin despejarse las dudas sobre las incertidumbres abiertas en América Latina y que los indicadores macroeconómicos en EE UU continúan siendo malos. Esta firma de inversión aconseja cautela.

 

 

 

 

 

 

 

Aunque las Bolsas han vivido una jornada de calma, lo cierto es que los expertos todavía buscan un suelo: 'Una tarea difícil de conseguir cuando las incertidumbres siguen sin ser superadas', decía José Luis Martínez.