China lanza su primera gran oferta de acciones de una telefónica
China continental, el primer mercado de móviles del mundo, con 175 millones de usuarios, lanzó ayer la primera oferta pública de venta de acciones (OPV) de una compañía de telefonía de su historia. China United Telecommunications, el segundo operador celular del país tras China Mobile, va a vender 5.000 millones de acciones a 2,3 yuanes (unos 30 céntimos de euro) por título.
Se trata de la mayor colocación realizada en el país en número de acciones y la segunda en valor, tras la que en julio del año pasado protagonizó el gigante petrolero Sinopec, cuyo valor fue de 11.800 millones de yuanes (unos 1.500 millones de euros), frente a los 11.500 de la actual. Desde entonces, sus acciones han caído un 17%. El tramo destinado a inversores institucionales es del 45% del total de la oferta. El reservado a minoristas y particulares será lanzado pasado mañana. La compañía no ha dicho cuándo comenzarán a cotizar las acciones en la Bolsa de Shanghai.
El precio de la OPV es bastante inferior al esperado, ya que el pasado abril la compañía pensaba lograr entre 15.000 y 16.000 millones de yuanes. La empresa no quiere que los inversores pierdan confianza ante la posibilidad de una fuerte caída de las acciones tras comenzar a cotizar. Los títulos de China Unicom, filial de China United que cotiza en Hong Kong, se han desplomado un 60% desde que salieron al mercado en 2000, y los de su rival China Mobile han bajado un 35%. Las dos empresas mantienen una lucha encarnizada por la cuota de mercado.
Los analistas esperan que la demanda de títulos de China United supere ampliamente la oferta, ya que se trata del primer operador que saldrá a Bolsa en China continental y llega a un mercado en efervescencia. En ciudades como Pekín o Shanghai, el teléfono móvil se ha convertido en un artículo de uso común. Enormes tiendas, con decenas de empleados, ofrecen todos los modelos asiáticos y occidentales imaginables. Y pocos jóvenes se pasean por la ciudad sin su móvil en el bolsillo o colgado del cuello.
El precio de 2,3 yuanes por acción representa 20 veces el beneficio del año pasado de la compañía, mientras que en su filial de Hong Kong este ratio es de 15 veces. Como los dos títulos no son intercambiables, según los analistas no tiene por qué haber correlación entre sus movimientos.
Los accionistas pagan habitualmente en China precios superiores a los que pagan los inversores por las mismas acciones en el extranjero debido a las pocas posibilidades de elección en China continental.