Revista de Prensa
Señal telefónica débil en Alemania
El rescate de 400 millones de euros del grupo alemán de telecomunicaciones Mobilcom, realizado por el canciller alemán Gerhard Schröder vía un consorcio de bancos de propiedad pública, es impresionante. El rescate debe mantener la compañía en marcha al menos hasta las elecciones generales del próximo domingo. Las perspectivas a largo plazo de Mobilcom son sombrías, como lo son para una genuina reforma económica en Alemania después de las elecciones (...). Básicamente, se le está diciendo al pueblo alemán que su economía puede rejuvenecerse sin dolor (...).
Cuando las empresas tienen problemas, el hada buena siempre aparece para salvarlas (...). No es ni mucho menos la primera vez que Schröder actúa de esta manera. A lo largo de gran parte de su carrera se ha mostrado dispuesto a intervenir en los fracasos empresariales si las necesidades políticas lo exigían (...).
Esta vez Schröder ha llevado su intervencionismo un poco más allá al ofrecer a Mobilcom el respaldo gubernamental en un pleito contra France Télécom, el grupo francés (...) cuya retirada de Mobilcom (...) provocó la crisis de liquidez (...). Los instintos de la oposición conservadora, el CDU/CSU, son casi tan intervencionistas como los de Schröder. Ayer responsabilizaron de los problemas de Mobilcom al modo en que se vendieron las licencias de telefonía de tercera generación, pero no cuestionaron la decisión de intervenir.
Quizá este rescate logre el éxito que no tuvieron en la constructora Holzmann y la firma de ingeniería Babcock Borsig. Quizá la compañía resulte tan 'sana en los cimientos' como dice Schröder.
Más probable es que acabe luchando por sobrevivir, complicando la consolidación del saturado mercado de telefonía de tercera generación. Y Alemania tendrá que afrontar el hecho de que, a veces, tiene que permitirse la quiebra incluso de las compañías políticamente sensibles.
El delirante optimismo oficial de Venezuela
No pocas veces nos preguntamos si aquello que oímos de los portavoces del Gobierno respecto a los asuntos económicos del país admite correspondencia con la realidad (...). Desde luego que nos gustaría vivir en ese 'mar de la felicidad' que nos quiere construir el presidente Chávez, pero mientras tanto tenemos que pagar algunos servicios públicos, el pasaje hacia el trabajo y, aunque no sea revolucionario, comer de vez en cuando (...).
La verdad es que mientras los venezolanos oímos a ese señor, la economía languidece ante la actuación de un Gobierno incompetente, al que sólo le importa la política menor y el poder ejercido en función de complacer a una minoría de amigos del entorno presidencial, que están haciendo negocios (...). El grado de postración en que se encuentra la economía por el cierre de miles de empresas (...), el creciente desempleo que ya alcanza el 16,2%, y la brutal devaluación de más del 90% que ha sufrido la moneda en lo que va de año, parecieran importarle poco a este Gobierno que se empeña en burlarse del país y todos los venezolanos al asegurar que este será el semestre de la reactivación (...).
Por un lado los ministros del ramo hacen reiterados llamamientos a los inversionistas a que traigan sus capitales al país para levantar la economía, y por el otro sale Chávez a ahuyentarlos con anuncios sobre proyectos de decretos de expropiación de las empresas.
Como si no fuera suficiente, el mandatario arremetió nuevamente este domingo contra los banqueros y los amenazó con promover retiros masivos de depósitos de los bancos que se nieguen a comprar bonos de deuda pública.
Chile se promociona en la Unión Europea
La misión de promoción de inversiones que encabeza el ministro de Hacienda, Nicolás Eyzaguirre, en Europa es una valiosa señal respecto del esfuerzo público-privado que debe realizar Chile en momentos de incertidumbre económica local y regional. El grupo (...) visitará Francia, Holanda y Dinamarca para atraer inversiones y posicionar a Chile como destino entre los inversionistas de esos países.
Las alianzas público-privadas son indispensables para consolidar el proyecto (...) del Gobierno.