Ericsson cae el 6,11% tras rebajar Moody's su calificación crediticia

Las acciones de Ericsson sufrieron en la jornada de ayer un retroceso del 6,11%, después de que la agencia de calificación crediticia Moody's rebajase el rating a Ba2. Este recorte supone un paso atrás para Ericsson, que hace pocas jornadas se apuntaba fuertes ascensos bursátiles gracias a la exitosa colocación de una ampliación de capital con la que redujo su abultada deuda.

La calificación anterior a la rebaja, sostiene la firma de calificación, incluye el efecto de la ampliación de capital. El recorte obedece al anuncio de varias compañías de telecomunicaciones de congelar o reducir sus planes de inversión en telefonía móvil de tercera generación. En el mercado alemán, por ejemplo, Telefónica y Sonera han paralizado el desarrollo de su filial de UMTS, mientras Mobilcom se encuentra a un paso de la suspensión de pagos.

Esta rebaja de calificación obligará a la compañía a desembolsar más dinero en concepto de intereses, aunque ayer Ericsson reiteró que dispone de suficiente liquidez para hacer frente a su deuda. Es la cuarta vez este año que Moody's rebaja el rating de la empresa sueca. Ericsson, además, está presionada porque financió compras de equipamiento a clientes que, como Mobilcom, son poco solventes.