Nueva York retrocede en el aniversario de los atentados
Wall Street conmemoró el primer aniversario de los atentados del 11 de septiembre con caídas. Durante casi la sesión, las alzas fueron la tónica. La ausencia de noticias negativas, en un día que había provocado gran alarma, fue la mejor noticia gran parte de la jornada. Sin embargo, poco antes del cierre las subidas se evaporaron. Ni siquiera el sentimiento de patriotismo que había prevalecido en la sesión pudo sostener las alzas.
Las Bolsas rompieron así con tres ganancias consecutivas. La publicación del Libro Beige de la Reserva Federal, que reforzó la hipótesis de debilidad económica, hizo mella en los índices.
El S&P 500 no pudo mantener las subidas y cerró con una caída mínima del 0,01%; el Dow Jones, un 0,25%, y el Nasdaq, un 0,35%.
Los actos de conmemoración programados por el mercado estadounidense, que se alargaron más de lo previsto, desencadenaron una nueva jornada de bajo volumen. La ausencia de inversores volvió a ser, así, una de claves de una sesión carente de alicientes.
La apertura de la sesión en Nueva York se retrasó más de lo anunciado, hasta que finalizaron los actos en la Zona Cero y Washington. El Nasdaq, tal y como había anunciado, abrió hora y media más tarde. La apertura se produjo, entonces, con una hora de diferencia entre uno y otro.
Las ceremonias también atrasaron la publicación del Libro Beige de la Reserva Federal. El banco asegura en su informe que la economía se ha desacelerado desde julio por el mal comportamiento del sector manufacturero, y además no ha habido mejoras notables en el desempleo.
En este ambiente, algunas noticias empresariales pasaron inadvertidas. La firma de chips Xilinx confirmó las previsiones y dio cierto ánimo al sector. El valor sumó el 2,8%
En el polo opuesto, Honeywell, que enfrenta un juicio por las enfermedades derivadas de usar amianto en la producción de componentes de automóviles, bajó el 5,13%.
El retraso en la apertura de los mercados estadounidenses redujo el periodo de coincidencia operativa con las plazas europeas. La apertura alcista del Nasdaq afianzó las ganancias que ya registraban los índices. Francfort sumó un 2,6%, Londres ganó un 0,84%, y París, el 2,95%.
Los avances fueron posibles gracias al fuerte repunte de tecnológicas y telecomunicaciones, si bien, por segundo día consecutivo, todos los sectores del Stoxx cerraron al alza.
France Télécom centró el interés del sector por rumores que apuntaban a que en breve saldrá del capital de Mobilcom, donde tiene una participación del 28,5%, lo que supondría en la práctica la quiebra de la compañía de móviles. La francesa subió un 2,7% y su filial Orange, el 10,2%. Por contra, la alemana se desplomaba al caer el 54,5%.
Las tecnológicas se sumaron al buen tono de las telecos. La advertencia del gigante Nokia, que la víspera rebajó las previsiones de ventas, cayó pronto en el olvido y los fabricantes de equipos de comunicaciones encabezaron las alzas del mercado. Ericsson se anotó un 10%, y la finlandesa, un 7,67%.
El nerviosismo por la situación financiera de algunas aseguradoras volvió a pesar en su cotización. En la sesión de ayer, la mayor penalización correspondió a Aegon, que perdió un 4,49%.
Los índices de la región evitaron el contagio de Wall Street. México sumó un 0,57%, y Brasil, el 2,16%. En Argentina, donde se anunció una nueva flexibilización del llamado corralito, el Merval sumó un 2,42%. El volumen, sin embargo, se mantuvo reducido por las restricciones aprobadas para evitar la salida de divisas del país.
La Bolsa de Tokio encadenó ayer la tercera subida consecutiva, un 0,98%, contagiada por el buen tono de los mercados estadounidenses en las sesiones anteriores. En lo que va de semana, el Nikkei ha recuperado un 2,96% tras tocar mínimo de 19 años.