El Urquijo decide cerrar su filial en Argentina
El Banco Urquijo confirmó ayer que abandona Argentina y que, por tanto, los planes de expansión de la matriz, el grupo luxemburgués KBL, en Latinoamérica se suspenden.
El banco ha solicitado a las autoridades argentinas el cierre de su oficina, que llevaba dos años instalada en el país, y que debido a las circunstancias 'problemáticas' en que se ha visto inmerso el país austral no ha podido conseguir su afianzamiento.
KBL pretendía expandirse por Latinoamérica y para ello consideró que Banco Urquijo era la entidad idónea para entrar en ese continente, debido a la afinidad existente.
El diario Buenos Aires Económico se hizo ayer eco de esta información y señalaba que el Urquijo promoverá una salida ordenada del país austral, ya que solicitó su cierre voluntario, aportó los capitales necesarios para cancelar sus deudas y saldos reprogramados y avisó a sus clientes de la decisión.
'Lamentablemente, se murió el mercado local de inversiones, la Bolsa ofrece poco volumen, las empresas no están bien, no hay demanda de productos y el negocio para el que nos preparamos hoy carece de rentabilidad', aseguró el gerente general de la entidad, Claudio Nowack, a ese diario.
La entidad del grupo KBL se retirará de Argentina dos años después de haber inaugurado su filial en la Capital Federal y de haber decidido que Buenos Aires sería cabecera de sus negocios en Brasil, Chile y México, entre otros países.
El Urquijo se instaló en Argentina a principios del año 2000. Desde entonces sólo ha captado con su única oficina y una plantilla de 14 empleados 300 clientes, que habían depositado en el banco 15 millones de dólares en pasivo, mientras que las operaciones de activo se elevaban a 42 millones de dólares.
El proceso de cierre ha sido acordado con las autoridades del Banco Central de la República de Argentina, asegurándose por parte del banco 'el cumplimiento de todas las normas aplicables, destacando el compromiso de la sucursal en el cumplimiento de sus obligaciones con clientes, empleados y proveedores', señala en Urquijo en un comunicado remitido ayer.
El Urquijo es el primer banco español que decide irse de Argentina, y el tercero extranjero. En los últimos meses, el Banco Central suspendió las operaciones del Scotiabank Quilmes, de capital canadiense, en tanto que el banco Crédit Agricole, de capital francés, anunció su retirada del país, con lo que los bancos que controlaba, Suquía, Bersa y Bisel, pasaron a ser administrados por el estatal Banco Nación.
El Santander Central Hispano y el BBVA han decidido quedarse en estos momentos en Argentina, aunque no están dispuestos a inyectar más capital en sus filiales, el Banco Río y el Banco Francés, respectivamente.