El 'chicharreo', colgado en la Red
La CNMV ha remitido al fiscal la investigación sobre un particular que se dedicaba, presuntamente, a difundir información falsa a través de Internet para influir en la cotización de Puleva Biotech. Los rumores son parte misma de la Bolsa y tan antiguos como ella. La manipulación de acciones a través de información falsa o, al menos, sesgada, también.
Los foros de Internet suelen ser, por su propia esencia, un nido de especuladores. Es un espacio gratuito en el que se puede opinar de forma anónima, sin responsabilidad y, además, en tiempo real. Ayer era un buen día para darse una vuelta por los foros. Había de todo. Desde el insulto puro y duro a los piques entre foristas y, también, dosis de sentido común.
Decían algunos que hacer caso a alguien que se cuelga el cartel de directivo de Puleva Biotech y se pasa el día calentando el valor es un disparate. Y que hay cosas peores que perjudican en mayor medida al inversor particular. Como, por ejemplo, las transmisiones patrimoniales que suponen el cambio de manos de una empresa y que privan al pequeño accionista de la prima de control. O cuando los analistas aconsejaban fuerte compra de Terra a 120 euros. O la política de comunicación de hechos relevantes de ciertas empresas.
Cuantitativamente, estos casos pueden haber provocado más pérdidas (o lucro cesante) a los pequeños inversores que el supuesto directivo de Puleva Biotech. Es cierto, y son gravísimos fallos del sistema que deben ser corregidos con firmeza.
Ahora bien, hay una diferencia entre expresar opiniones en un foro y mentir, por mucho que la mentira sea poco verosímil. Llegue o no a mayores este caso, es una aviso a navegantes bueno para el funcionamiento del sistema. Y el que haya multitud de problemas más graves, que los hay, no exculpa al tramposo.