Atapuerca fusiona fósiles y tecnología
Arqueología e informática se han unido en los yacimientos de Atapuerca (Burgos), el único lugar de Europa donde es posible seguir la evolución de los primeros humanos que habitaron el continente hace aproximadamente un millón de años. Desde ayer, los 140 arqueólogos que trabajan en las excavaciones utilizan, además de sus herramientas tradicionales como picos, palas y cepillos, agendas electrónicas de mano conectadas a un servidor instalado al pie del yacimiento.
El sistema, pionero en el mundo y desarrollado por IBM específicamente para estas excavaciones, ha sido cedido por la empresa a la Fundación Atapuerca, y proporciona a los investigadores un sistema móvil e inalámbrico para recopilar los datos y analizarlos posteriormente de un modo más rápido y eficaz. Hasta ahora, los arqueólogos utilizaban un sistema de registro de datos manual, escribiendo sobre un papel cada uno de los restos que encontraban en el yacimiento.
Los investigadores también escribían a mano sobre etiquetas en blanco las características de las piezas, que pegaban a una bolsa de plástico para su posterior análisis. Por la tarde, en el laboratorio, se procedía a la transcripción de todos los datos al ordenador. 'Con el nuevo sistema, ganaremos tiempo y evitaremos errores que se producen al anotar en papel, ya que el ordenador corrige automáticamente las medidas equivocadas, afirma uno de los arqueólogos, mostrando orgulloso su agenda electrónica'.
Cada uno de los equipos en los que se divide el grupo de arqueólogos, que trabajan en seis yacimientos, tendrá a su disposición agendas electrónicas conectadas a un repetidor de la señal a través de tarjetas inalámbricas. A su vez, éstas tienen conexión con un ordenador portátil que hace las veces de servidor. Así, los arqueólogos tendrán todos los datos procesados tanto en el portátil como en las agendas, información accesible a todos los investigadores. Los arqueólogos también contarán con un sofisticado sistema de impresión de etiquetas.
'Este proyecto supone un punto de inflexión en el futuro de las investigaciones arqueológicas. Nos permitirá una mayor rapidez en la toma y transmisión de datos, por lo que dispondremos de más tiempo para el análisis de los restos', afirma Eduald Carbonell, codirector de las excavaciones de Atapuerca. Diariamente se procesan en Atapuerca unos 1.000 registros, confirmando que la historia de estos yacimientos es interminable, al haber estado constantemente ocupado por grupos humanos. En la campaña del año 2000, por ejemplo, se descubrieron 350 fósiles, lo que hace suponer a los expertos que harán falta 20 generaciones de antropólogos sólo para poder estudiar estos restos.
'Es un orgullo mostrar el carácter innovador de nuestros sistemas, así como el compromiso de IBM con el avance científico y cultural de nuestro país', afirmó ayer Amparo Moraleda, presidenta de IBM España. Es probable que la inmensa Sierra de Atapuerca esconda otros secretos tan trascendentales para conocer el origen del hombre. ¿Contribuirán las nuevas tecnologías a descifrar la etapa más oscura de la evolución humana?