Standard & Poor's trata de aclarar el marasmo de contabilidades
Standard & Poor's, la compañía que calcula, entre otros muchos, el índice S&P 500, ha creado una nueva definición de beneficio que aplicará a las empresas miembros de sus índices. Eliminará ciertos apuntes contables de los resultados oficiales, como las amortizaciones de fondo de comercio, las ganancias o pérdidas extraordinarias por venta de activos o por operaciones de cobertura con derivados. Incluirá, asimismo, los gastos derivados de planes de opciones sobre acciones, el coste de operaciones de reestructuración y las amortizaciones aceleradas de activos.
Sólo la inclusión de los gastos de los planes de opciones sobre acciones puede reducir el beneficio de los miembros del S&P 500 un 10%. Actualmente las empresas tienen posibilidad de incluir esta partida o en los gastos o como una nota a pie de página. Sólo dos empresas del S&P 500 la incluyen en la cuenta de pérdidas y ganancias.
Pérdida de confianza
Cuando Standard & Poor's explica el motivo que le lleva a establecer un nuevo sistema de cálculo de los beneficios, no tiene reparos a la hora de señalar que la confianza en las cuentas generalmente aceptadas ha caído dramáticamente. Y apunta que si los resultados hubiesen sido más transparentes, empresas que ganaban dinero hubiesen presentado pérdidas, y el inversor habría podido tomar sus decisiones con más información.
Estos cambios, en todo caso, se hacen sobre la base de los resultados oficiales, acordes con la contabilidad US Gaap. Si los resultados de las empresas estadounidenses se siguen midiendo con la vara de las previsiones proforma efectuadas por los analistas, nada habrá cambiado, pues se seguirá pudiendo inflar las cuentas a voluntad de los gestores.