'Hemos entrado con Dragados en el negocio forestal desde EE UU'

Joseba Mikel Grajales (Vitoria, 1952) ha sido nombrado este mes Mejor Empresario Vasco de 2001, un galardón concedido por Caja Laboral, EITB y Empresa XXI. Junto a su socio Juan Luis Arregui fundó el grupo Gamesa en 1975, ahora controlado por el BBVA e Iberdrola a través de Corporación IBV. Su siguiente aventura profesional, también con Arregui, fue Guascor. Entraron en esta empresa en 1994, cuando facturaba 15,03 millones con 200 trabajadores, y contabilizaba unas pérdidas acumuladas de 4,81 millones. Además sólo fabricaba un producto, los motores marinos, en su única planta de Zumaia (Guipúzcoa). Hoy es un grupo que este año prevé unas ventas de 300,51 millones, con una plantilla de más de 1.000 personas y una base industrial que se extiende por 17 países y que está orientada a las energías renovables.

Pregunta. ¿Van a pujar por los parques eólicos que Gamesa ha puesto a la venta?

Respuesta. No. Además de que tenemos un vínculo accionarial (junto a Arregui suman el 3,93% de Gamesa), Guascor desarrolla su propio plan eólico, con varios parques en funcionamiento y otros en promoción repartidos por Europa y América. Por cierto, somos los segundos clientes en importancia que tiene Gamesa, a la que contratamos los aerogeneradores y otros equipos de producción.

P. ¿Cuáles son los próximos planes de Guascor?

R. Hemos concluido un programa de inversiones de 750 millones y ahora empieza otro, para el periodo 2002-2005, de 1.200 millones (el presupuesto inicial era de sólo 1.000 millones). Los objetivos son crecer en energías renovables y en el negocio de plantas de desimpacto ambiental, con la filosofía de buscar soluciones nuevas que unan tecnología y medio ambiente.

P. ¿Alguna operación reciente?

R. Llevábamos tiempo buscando soluciones para los problemas que genera la desforestación, entre ellos la menor absorción de CO2. Así que buscamos a los mejores del mundo en este campo. Estaban en Indiana (Estados Unidos). Se trataba de una empresa familiar, denominada AFT, que llevaba tres generaciones investigando el desarrollo de árboles de madera noble, de gran calidad, para que se cultivaran en el menor tiempo posible, en vez de en 100 años, en 25 años. AFT, ahora denominada Foresta Capital, y que trabaja con la Universidad Purdua de Indiana, también fue detectada por el grupo Dragados. La compramos entre los dos, al 50%.

Además de su sede en Estados Unidos, Foresta Capital ya cuenta con otra en Madrid para su desarrollo internacional. Tiene unas posibilidades enormes. Los fondos de pensiones, que invierten a largo plazo, están muy interesados. Incluso las multinacionales petroleras se han acercado. Ya trabajamos en algunos proyectos con estas corporaciones para forestarles extensiones de hasta 2.000 hectáreas. Con estos bosques, las petroleras compensan en parte su impacto al medio ambiente, con lo que recomponen su imagen, y consiguen un producto rentable, porque la madera de los árboles desarrollados por Foresta es de gran calidad y facilita su venta.

Debajo del paraguas de la Corporación Seche

 

Guascor supone tan sólo uno de los negocios de la Corporación Reche, que está controlada por Grajales y Arregui, y que tiene intereses en otros mercados, tan dispares como el de la sanidad privada y el de las granjas ganaderas. Este ejercicio, Reche alcanzará un volumen de ventas de 36,06 millones con 6.000 trabajadores. En el negocio sanitario, su cabecera es Cosanitas, que es líder del mercado en el Caribe. En concreto, ocupa el primer puesto en cuanto a sanidad privada en Venezuela y Colombia, y recientemente ha suscrito una alianza con un grupo de República Dominicana para el desembarco de Cosanitas en este país. A Grajales y Arregui les gustan los socios locales porque disminuyen los riesgos de inversión. En Hungría y Polonia también han entrado recientemente, en este caso con plantas de desimpacto ambiental, y asimismo de la mano de grupos del país.

 

 

 

 

 

 

 

De vuelta a Guascor, este grupo mantendrá en los próximos años su expansión internacional, con tres mercados prioritarios en los que ya está presente, y que son los de Estados Unidos, Canadá y México. La internacionalización, 'que ya desde los tiempos de Gamesa no nos daba miedo', dice Grajales, puede proseguir por China, 'aunque hay que tener paciencia y acertar con el socio'. La red de Guascor también se extiende por África (Marruecos, Suráfrica y Argelia, en este último país para suministrar motores marinos a los buques pesqueros españoles que faenan en sus aguas), y llega a India y Bangladesh.