Dudas de la firmeza de la recuperación en Estados Unidos Continúa la debilidad de la actividad económica italiana
En Estados Unidos los últimos indicadores publicados, tanto de actividad como de demanda, han sembrado ciertas dudas sobre la firmeza de la recuperación. La producción industrial en mayo cayó a una tasa mayor de la prevista, lo que no ocurría desde noviembre de 2001. Pese a ello, el ritmo de caída en mayo (-1,2%) ha sido inferior al de meses anteriores (-4,1% en el primer trimestre). Especialmente malo ha sido el dato del IPI de equipos y bastante flojo el del IPI de construcción. El IPI de bienes de consumo, por su parte, ha crecido por encima de nuestra previsión.
Por el lado de la demanda, los indicadores de ventas también han defraudado. Las ventas al por menor han ralentizado su crecimiento hasta una tasa del 2,5%, frente a un 3,3% en el primer trimestre. Las ventas de coches, por otra parte, han acelerado su ritmo de caída, (-4,8%, frente a un -3,1% en el primer trimestre de 2002).
No obstante, no todos los datos publicados han sido negativos. La confianza de los consumidores ha mejorado en mayo, superando el ligero traspié de abril. El índice ISM, indicador adelantado de actividad industrial, también ha superado el bache de abril, situándose en mayo en el nivel más alto desde febrero de 2000. Por otro lado, la tasa de utilización de la capacidad productiva, aunque se mantiene en niveles bajos, muestra una evolución favorable.
Por último, el dato más significativo es la mejora que se viene produciendo en los últimos meses en el mercado de trabajo. En mayo el empleo aumentó en 48.000 personas, siendo este el segundo mes consecutivo en que se produce un aumento del empleo. En los sectores manufactureros el empleo sigue reduciéndose, aunque a tasas cada vez menores: -23.000 en mayo frente a una media mensual de -95.333 en el primer trimestre. En los sectores productores de servicios el empleo sigue expandiéndose: 64.000 en mayo frente a una media mensual de 32.333 en el primer trimestre.
Los datos recientemente publicados deben ser interpretados con cierta cautela. Creemos que no están anticipando un cambio de tendencia en la recuperación, sino más bien una suavización en el ritmo de la misma.
A ello colaborará el hecho de que los datos macro y el buen comportamiento de los precios hace poco probable que la Fed endurezca su política monetaria.
En Italia, el índice de producción industrial (IPI) de abril quedó algo por debajo de nuestra previsión. Por componentes, los bienes de consumo y de inversión decepcionaron nuestras expectativas, pero como dato positivo los bienes intermedios han sorprendido favorablemente de forma ininterrumpida desde el principio de año.
La caída interanual registrada en abril ha sido del 3,5%, que, aunque no alcanza los niveles de noviembre y diciembre, es más elevada de lo que esperábamos a principios de año. Aún no hay pruebas de que la recuperación en la actividad haya comenzado, lo que unido a los problemas del mercado laboral nos llevan a rebajar las previsiones de IPI para el conjunto del año hasta una variación nula o ligeramente negativa (-0,1%). La confianza de los consumidores italianos ha caído en junio al nivel más bajo de los últimos dos años, afectada por problemas internos, como la crisis en Fiat y sus efectos sobre el mercado de trabajo.
La inflación de mayo en la eurozona fue del 2,0% interanual, cumpliéndose el objetivo del Banco Central Europeo (BCE) por primera vez en el año. No obstante, el dato superó ligeramente nuestra previsión, siendo especialmente preocupante la confirmación de nuestras expectativas de repunte de la inflación subyacente (que no incluye los componentes volátiles, como energía o alimentos no elaborados): ha subido dos décimas respecto a la de abril, repitiendo el 2,6% interanual que mostró en todo el primer trimestre.
En el Reino Unido la tasa de paro se redujo en mayo hasta el 3,1% (desde el 3,2% de abril), manteniendo su buena evolución. Los precios crecieron en el país británico un 1,1% y la inflación subyacente volvió a bajar del 2%, al situarse en mayo en el 1,8% (2,3% de marzo y abril).
En Brasil la demanda interna sigue sin dar señales de recuperación. En abril las ventas reales al por menor presentaron un decrecimiento interanual del 4,8%. Este indicador no muestra una tasa de crecimiento positivo desde abril de 2001.
En Chile, el Imacec en abril sorprendió favorablemente, creciendo un 3,9% en tasa interanual. Este buen dato está en la línea del satisfactorio comportamiento mostrado por el IPI para este mismo mes.
Se consolida la mejora del sector industrial de la zona euro
El último dato del índice de producción industrial de la eurozona confirma las expectativas de recuperación, apoyadas hasta fechas muy recientes sólo en la favorable evolución mostrada por los indicadores de confianza de productores y empresarios. El IPI general superó nuestras previsiones por segundo mes consecutivo, mostrando la tasa de caída interanual más reducida desde septiembre pasado (1,8%). Por componentes, destaca la recuperación de los bienes intermedios, que cayeron menos de lo esperado de forma ininterrumpida desde febrero y han registrado la tasa de contracción más pequeña desde junio de 2001 (si exceptuamos el dato de agosto). Por su parte, los bienes de consumo no duraderos (los más directamente ligados a la evolución del consumo privado de Contabilidad Nacional) sorprendieron favorablemente por segundo mes consecutivo, reflejando una recuperación sostenida desde enero. Adicionalmente, el ritmo de deterioro de ambos tipos de bien se ha frenado claramente en los últimos meses.