Nuevas salchichas nutren el negocio de Viscofán
Viscofán produce suficientes envolturas de salchicha como para llegar a la luna. Recién estrenados clientes como Sara Lee han encontrado nuevos rellenos para la tripa de la compañía española. Pollo, pavo, proteína de soja y fécula de maíz son los nuevos ingredientes que se unen a los tradicionales, como lomo de cerdo, lengua y sangre. 'Se pueden hacer salchichas de cualquier cosa', asegura el presidente ejecutivo, Juan Ignacio Villegas.
El recorte de costes, la reducción en la competencia y la creciente demanda de salchichas de pollo y pavo, más bajas en grasa, pueden contribuir a que las ganancias del mayor fabricante de tripa de salchicha crezcan este año el 33%. Los inversores ya se han percatado.
Es la compañía que ha tenido el mejor comportamiento en el mercado continuo, con una subida del 80,33% en lo que va de año. Asimismo ha duplicado su cuota de mercado hasta alcanzar un 40% desde 1995 ofreciendo precios inferiores a los de sus rivales.
El estadista alemán Otto von Bismarck dijo que las dos cosas más desagradables de presenciar son cómo se hacen las salchichas y las leyes. La tripa de celulosa está fabricada con pulpa algodonosa disuelta en sosa cáustica y estiradas en tubos de cinco kilómetros de largo. Una máquina corta y comprime los tubos como un acordeón para convertirlos en una vara de 30 centímetros de largo, que pueden contener suficiente tripa para unos 200 perritos calientes. Los productores de alimentos llenan la tripa con carne y tras cocinarla le quitan la piel y la desechan. Otras tripas están hechas de plástico. Un tercer tipo se produce a partir del colágeno obtenido del cuero de vaca, y se deja en las salchichas blancas para que los consumidores las coman.
La tripa artificial fue inventada en Chicago por Erwin O. Freund, fundador de Viskase Companies, el mayor competidor de Viscofán. El problema con los intestinos naturales es que son cortos, irregulares y, para la mayoría de las personas, poco apetitosos. Viscofán ha superado las últimas crisis, especialmente la de las vacas locas, manteniendo los costes bajos.
También ha crecido más que otros rivales. Tiene ocho plantas: en España, Brasil, Estados Unidos, Alemania y la República Checa. Cuatro compañías venden el 80% de las tripas artificiales para salchichas, según BBVA Bolsa: Viscofán, Viskase, Devro del Reino Unido y Teepak.
Viscofán afirma que actualmente fabrica suficientes tripas como para llegar a la Luna. Y dado que un metro de tripa sirve para siete salchichas y que la Luna se encuentra a 356.630 kilómetros, hablamos de unos 2.000 millones de salchichas. Y eso que tan sólo la planta de Pamplona, donde tiene su sede, produce esa cantidad.