British Airways registra las mayores pérdidas desde su privatización
Un año de 'sacrificios y apuros' para British Airways y con pocas señales de mejora a la vista. La mayor aerolínea de Europa anunció ayer los peores resultados desde que fuera privatizada hace 15 años. Las pérdidas del ejercicio ascendieron a 200 millones de libras (326 millones de euros), arrastradas por el 11 de septiembre, el brote de fiebre aftosa en el Reino Unido, la competencia de las compañías de vuelos baratos y el estancamiento de la economía mundial. En el ejercicio anterior, finalizado el 31 de marzo, British Airways obtuvo un beneficio de 150 millones de libras (244,5 millones de euros).
La compañía considera que con estas medidas, la compañía está en posición de volver a la rentabilidad cuando el mercado repunte. Mientras tanto, poco consuelo pueden sacar a corto plazo de estas declaraciones los accionistas de la sociedad, que tendrán que conformarse y no percibir un dividendo final de este año.
Las rutas clave entre el Reino Unido y EE UU seguían arrojando beneficios 234,7 millones de euros, aunque éstos fueron 521,6 millones de euros menores a los del ejercicio anterior.
No obstante las cifras negativas, Rod Eddington, consejero delegado de la empresa, destacó el hecho de que los resultados habían superado las previsiones más pesimistas. Los analistas habían previsto unas pérdidas de hasta 652 millones de euros.
British Airways consiguió rebajar los gastos un 12,1% en el último trimestre y ha reducido su nivel de endeudamiento en 436,8 millones de euros en el mismo periodo. La compañía se ha fijado el objetivo de recortar los costes 1.059 millones de euros en los próximos dos años. La facturación en 12 meses cayó hasta 13.594 millones de euros, frente 15.126 millones de euros en el periodo precedente.
British Airways ha creado una nueva estructura de tarifas y ha modificado las comisiones que paga a las agencias para competir con las aerolíneas baratas. También venderá activos para conseguir mayor liquidez.