Aumentan los impagos comerciales en Alemania y Portugal
El grupo Coface, uno de los dos líderes mundiales del seguro de crédito a la exportación, ha revisado a la baja las calificaciones de riesgo-país de Alemania y Portugal, a los que coloca también en situación de 'vigilancia negativa' debido, en ambos casos, a 'la degradación del comportamiento de pago de las empresas en un entorno económico poco favorable'.
En su análisis sobre Alemania, los técnicos de Coface exponen que el crecimiento alemán sigue afectado por la ralentización de la coyuntura mundial, mientras que el consumo, sostenido gracias a la reforma fiscal, no progresa y no compensa la desaceleración de la demanda exterior.
La escasa rentabilidad de los bancos 'aumenta la selección de los créditos', añade el informe, para concluir que en este marco 'el riesgo de impagos aumenta' como también ha crecido un 15% el número de quiebras en 2001. Las regiones orientales son 'particularmente sensibles' y los sectores más afectados son el textil y confección, la distribución, la transformación de productos metalúrgicos, el comercio de papel, la construcción y los instaladores y operadores de redes de telecomunicaciones.
La atonía portuguesa
Respecto a Portugal, Coface detecta un parón en el crecimiento de las exportaciones debido a la pérdida de competitividad y a la todavía escasa demanda europea. El consumo de los hogares se ve 'ensombrecido' por la inflación y el creciente endeudamiento, que el año pasado alcanzó el 89% de la renta disponible; y, por otra parte, la caída de la confianza de la industria y la contracción de los gastos gubernamentales para grandes obras perjudican la inversión.
Con este panorama y con un déficit presupuestario que limita el margen de maniobra del nuevo Gobierno, las empresas 'se encuentran afectadas por una atonía de la demanda en el mercado doméstico y una pérdida de competitividad respecto a la mano de obra extranjera'. Especialmente vulnerables son los sectores textil y de la distribución comercial.