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Operación

Cunill compra Farco para atender la demanda de joyas

La firma catalana de orfebrería Cunill anunció ayer la compra de Farco, cooperativa fabricante de joyería que colaboraba en la producción de sus piezas. El objetivo de la adquisición es hacer frente a un incremento de demanda que no podía atender por falta de personal. Cunill también estudia asociarse con una compañía en Estados Unidos para fabricar en ese país y potenciar su presencia en dicho mercado.

Cunill ha adquirido la firma joyera catalana Farco para atender la creciente demanda de sus productos en España y Estados Unidos.

El director general de la compañía, Miquel Cunill, que no hizo público el importe de la operación, manifestó que la idea de comprar la cooperativa surgió ante 'un exceso de pedidos al que no podíamos hacer frente por falta de personal'.

El objetivo de la compañía catalana, que exporta el 58% de la producción, es aumentar su presencia en EE UU, mercado que concentra el 31% de sus ingresos, y convertirse en una de las cuatro grandes compañías del sector en ese país.

'Para llevar a cabo el gran salto que deseamos en Estados Unidos necesitamos triplicar nuestra producción', argumentó Cunill. La compra de Farco no es la única adquisición prevista por Cunill, ya que también estudia otras alternativas de adquisición en Latinoamérica, 'donde nos están ofreciendo muchas facilidades', apunta Cunill.

800 clientes en EE UU

La buena marcha del mercado estadounidense también ha impulsado a Cunill a buscar socios locales para fabricar en dicho país. La firma catalana cuenta con una cartera de 800 clientes en Estados Unidos y oficinas de representación en Nueva York, Dallas, Los Ángeles y Atlanta.

Otro de los objetivos de Cunill con la compra de Farco es relanzar la marca. Cunill decidió comprar la firma 'por la existencia de un entendimiento entre ambas empresa que va más allá de la simple relación cliente productor', opina Miquel Cunill. 'La colaboración de Farco con Cunill exigía un incremento de plantilla que Farco no se atrevía a llevar a cabo, con lo que optamos por la compra'.

Farco logró el pasado año una facturación de tres millones de euros, con 36 trabajadores. Miquel Cunill calcula que en 2003 Farco alcanzará unos ingresos de seis millones de euros.

Cunill, fundada hace 50 años en Barcelona, inició su desarrollo internacional en la década de los noventa. La firma catalana exporta a 23 países, entre los que sobresalen los mercados de EE UU, Suiza y Canadá. En 2001 ingresó 10,10 millones de euros, un 10% más que el año anterior. Tiene 160 empleados.

Aunque el director de la compañía no avanzó la facturación de la empresa prevista para 2002, aseguró que durante los primeros meses del año los ingresos han aumentado un 21% respecto el mismo periodo de 2001.

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